Cómo reparar las uñas estropeadas por la manicura semipermanente

La manicura semipermanente ha ganado popularidad en los últimos años debido a su larga durabilidad, resistencia y brillo. Sin embargo, el constante uso de productos químicos y el proceso de retirar el esmalte de las uñas pueden dejarlas débiles y frágiles. Si tus uñas han sufrido daños a causa del esmalte semipermanente, aquí te ofrecemos algunos consejos para repararlas.

El primer paso indispensable es aplicar una base protectora en la uña antes de proceder con la manicura semipermanente, con el fin de minimizar el daño. Además, es de vital importancia utilizar esmaltes de alta calidad que estén libres de ingredientes que puedan dañar tus uñas.

Retirada del esmalte

Es imperativo nunca arrancar el esmalte, ya que al hacerlo también se retira la capa superior de la uña, lo cual debilita y las hace propensas a romperse. Para retirarla correctamente, se puede aplicar quitaesmalte con o sin acetona, o acudir a un centro de estética donde la retiren con una lima o un torno eléctrico. Además, para un mejor cuidado de las uñas, se recomienda utilizar quitaesmalte sin acetona.

En el caso de llevar muchos días o meses consecutivos con la manicura hecha, es importante permitir que las uñas respiren. La mejor manera de hacerlo es no aplicar ningún esmalte durante al menos dos semanas, lo que favorecerá una recuperación más rápida.

Cuidado intensivo

Cuando no estés usando esmalte en las uñas, es imprescindible cortarlas y luego hidratarlas con productos como crema hidratante o aceite de cutículas. Esto no solo ayudará a prevenir daños mayores, sino que también fortalecerá las uñas. Para lograr que tus uñas se endurezcan, es recomendable utilizar una base fortalecedora o endurecedora, que, además, ayudará a prevenir roturas y proteger las uñas.

Por otro lado, no hay que olvidar proteger las manos cuando hacemos tareas del hogar. El uso de guantes es esencial para mantener la salud de las uñas. Los productos químicos que utilizamos diariamente, como jabones, detergentes o lejía, pueden causar daño tanto en las uñas como en la piel de las manos.

Tratamientos y consejos

El tratamiento con queratina se recomienda en la mayoría de los casos. Esto permite reconstruir y recubrir la capa córnea de la placa dañada debido al exceso de manipulación, lo que restaura la estructura y elasticidad de la uña de manera significativa.

Además, existen remedios naturales que pueden ayudar a mejorar la salud de las uñas, como la aplicación de aceite de coco o almendras varias veces al día, el uso de una crema de manos extra hidratante, o la aplicación de aceite de oliva o vaselina pura en un algodón, colocado sobre la uña y envuelto con papel de aluminio durante 20 minutos.

Si has probado todos estos consejos y no observas mejoras después de algunas semanas, es recomendable que consultes a un dermatólogo para recibir asesoramiento y posibles tratamientos especializados para reparar tus uñas dañadas.

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