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coronavirus

Bruselas quiere que las aplicaciones sean clave en la movilidad durante el coronavirus sin poner en riesgo la privacidad

La Unión Europea está preocupada por cómo usar estas aplicaciones móviles para frenar el coronavirus y que las tecnológicas se aprovechen de la situación.

A la Unión Europea le preocupa cómo usar las aplicaciones móviles para frenar el coronavirus sin poner en riesgo la privacidad de las personas. En un debate en el Parlamento Europeo han dejado claro que su uso debe ser voluntario y solo con un fin sanitario.

La UE quiere evitar que las empresas tecnológicas se aprovechen de este momento tan delicado, durante la pandemia de coronavirus, para desarrollar aplicaciones que bajo el paraguas de esa lucha contra el coronavirus pues terminan siendo inclusivas o acaben usando nuestros datos para otro propósito que no sea el sanitario.

Sube la presión en la Unión Europea

Así que está subiendo mucho la presión a que estas aplicaciones sean anónimas, voluntarias y temporales sobre todo porque aquí, en Bruselas, hay muchos que confían en que esta tecnología va a ser el mejor aliado para que las fronteras puedan reabrir cuanto antes y para que este verano podamos viajar seguro durante la crisis del coronavirus.

Cómo funciona la aplicación

La idea es sencilla usted se descarga la aplicación, el dispositivo lleva activado el bluetooth y le avisará si ha estado a menos de 2 metros de alguna persona que esté infectada con coronavirus. Siempre, claro está, que esa persona también tenga la aplicación en funcionamiento.

Pero los diputados no se fían. Quieren asegurar que nunca se sabrá la identidad del infectado de coronavirus y que solo se va a usar el bluetooth y no el GPS, así que nunca estaremos geolocalizados. "Lo quiero decir muy claro" advertía el comisario de la Unión Europea "esto no va a suponer una vigilancia masiva".

Otra preocupación: los datos personales

Y esta es otra de las preocupaciones. Todos los datos se deben destruir una vez que pase la pandemia de coronavirus. Esta tecnología podría ser clave a la hora de reactivar el turismo aunque siempre va a ser voluntaria. En Europa todavía estamos en fase de pruebas. En Suiza la están testando los militares y en el Reino Unido, se está utilizando en la isla de White, una especie de banco de pruebas. "Es una buena idea. Yo quiero saber si he estado con alguien que tiene el coronavirus" dice esta ciudadana británica. Una iniciativa que sería más o menos efectiva dependiendo de cuanta gente participe.