Publicidad
HISTORIA DE SUPERACIÓN
Un teniente de la Guardia Civil que quedó tetrapléjico se licencia en Derecho con 36 matrículas de honor
Su vocación de ser Guardia Civil quedó frustrada por la bala de un compañero en el año 2006. Le dejó atado a una silla de ruedas de por vida pero no afectó a su cerebro. Javier Gómez ha conseguido ser el mejor alumno de derecho de su curso con 36 matrículas de honor. Todo un ejemplo de superación y voluntad de hierro.
A Javier Gómez la imprudencia de un compañero le arrebató el sueño de ser Guardia Civil, "Me disparó y me quedé tetrapléjico porque me dañó dos vertebras". Tenía sólo 24 años pero supo afrontarlo, "Fue un cambio brutal y tuve que buscar otra ocupación". Las ganas de salir adelante las encontró estudiando Derecho donde con empeño consiguió 36 matrículas de honor y el premio extraordinario de licenciatura de la Universidad de Zaragoza.
Todo esto lo ha conseguido gracias a la colaboración de sus padres que han sido sus verdaderas manos, "eramos un poco como un equipo, para hacer las prácticas se las dictaba a mi madre y luego las pasaba mi padre ordenador". Era un chico alto y fuerte que soñaba con ser la Guardia Civil pero en un instante su mundo se vino abajo. Ahora trabaja en Derecho Internacional Privado y su historia de superación es todo un ejemplo.
Publicidad