La Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, en colaboración con la Universidad de Málaga, ha diseñado el prototipo de un nuevo respirador para reforzar la asistencia médica como consecuencia de la enfermedad COVID-19.
Se trata de un dispositivo creado por un equipo de varios profesionales del ámbito sanitario de Málaga que han ideado un respirador hecho con piezas industriales comunes y evitando las que están relacionadas con los respiradores para no provocar desabastecimiento.
Con piezas industriales se pueden fabricar en dos horas
Estiman que el dispositivo se puede fabricar en dos horas, ya lo han probado con éxito en animales donde los resultados son satisfactorios 24 horas después de su funcionamiento.
Se trataría de una alternativa a usar en casos de extrema necesidad, y su seguridad estaría abalada por una empresa externa
Este tipo de respirador consigue suministrar oxígeno al paciente mediante conducción , y no oxígeno de ambiente, como en otras iniciativas que se han llevado a cabo en los últimos días.
Para casos de extrema necesidad
Los creadores de este respirador creen que se está “ofreciendo así una alternativa real a los actuales respiradores homologados que se encuentran en las unidades de cuidados intensivos para pacientes graves con la sintomatología de la enfermedad COVID-19”, aseguran los creadores.
Aclaran también, que el modelo planteado de fabricación de los respiradores tiene el objeto de ser usados en caso de extrema necesidad, actuando como respaldo a los existentes y que estuvieran en uso con otro paciente.
Con el fin de garantizar que los respiradores cuentan con todas las medidas de seguridad y eficacia, las unidades que se vayan produciendo, serán validadas por un laboratorio externo. Varias empresas ya se han mostrado interesadas.
