La OMS y sus asociados celebran el Día Mundial Sin Tabaco con el fin de enfatizar en los riesgos asociados con el tabaquismo, tanto para la salud como en otros ámbitos, y abogar por políticas eficaces para reducir su consumo.
Diversas enfermedades tiene como nexo común su consumo. Por ejemplo, alteraciones respiratorias, el desarrollo de varios tipos de cáncer (faringe, laringe, pulmón, páncreas, estómago e hígado) o la aparición de varios tipos de patologías como la esclerosis múltiple o los abortos prematuros.
A continuación, algunas cifras y mitos en base a los datos facilitados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
- 7 millones de personas mueren al año por el tabaco. De esa cantidad 6 millones con consumidores habituales 890.000 son fumadores pasivos, es decir, por respirar el humo.
- Casi un 30% de la población mayor de 16 años es fumadora y de ese porcentaje se estima que aproximadamente la mitad morirá de una enfermedad relacionada con el tabaquismo.
- Tres de cada cuatro personas quieren dejar de fumar porque son conscientes de sus riesgos, pero no pueden si no es con ayuda de un profesional.
- Con estar tan solo unos días sin fumar, el organismo nota mejorías en las capacidades para oler, saborear comidas y respirar. Normalmente, el cuerpo se siente con más energía.
- Después de estar un año sin fumar, se reduce el riesgo de enfermedad coronaria a la mitad de un fumador. Tras 15 años, este factor se iguala.
- Tras dos años sin fumar, las posibilidades de abandonar el tabaco son muy altas.
- La prohibición de fumar en lugares públicos no ha supuesto un aumento del tabaco en lugares privados como el coche o la casa. Es más esas leyes animan a más personas a dejarlo.
- La prohibición de la publicidad reduce su consumo en un 7 % de media, aunque en algunos países analizados ese porcentaje se eleva al 16%. Las fotos de las consecuencias del tabaco en las cajetillas conciencian a sus consumidores.
En el caso de España, uno de cada cuatro españoles fuma y son más los fumadores hombres (27 %) que las mujeres que consumen tabaco (18 %), según datos de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), que indican que la prevalencia del tabaco es inversamente proporcional al nivel de ingresos.
