El periodista Vicente Vallés sobre el asalto al Congreso de los Estados Unidos por afines a Donald Trump

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Elecciones Estados Unidos 2020

La opinión de Vicente Vallés en la jornada de elecciones en Estados Unidos: "Atentos a Florida"

A la hora en la que se escribe esta crónica desde Washington, los centros de votación están abriendo sus puertas en todos los estados de la costa este de Estados Unidos. Por tanto, aún no ha llegado el momento de las respuestas. Estamos en pleno proceso de acumulación de dudas e incógnitas.

En resumen

Estamos en pleno proceso de acumulación de dudas e incógnitas. La más evidente es la duda que provocan los sondeos. No hay uno solo que augure la victoria de Donald Trump. Y eso, lejos de hacer que se dé por segura su derrota, alimenta la incertidumbre sobre el resultado final, porque esta no sería la primera vez que Trump va directo hacia la derrota y termina siendo el vencedor. Ocurrió hace cuatro años y nadie se atreve a jugarse su patrimonio a que tal cosa no vuelva a suceder hoy.

En 2016 Clinton superó a su rival en tres millones de votos y augurar su derrota con esa ventaja era más propio de chamanes que de encuestadores

En 16 años sólo dos presidentes han ganado con menos votos

El pintoresco sistema electoral americano ha permitido algo poco común: que en un periodo de dieciséis años y cinco elecciones dos candidatos hayan sido presidentes a pesar de tener menos votos que su rival: George Bush frente a Al Gore en 2000, y Donald Trump frente a Hillary Clinton en 2016. Y esta realidad tiene dos efectos. El primero, que cualquier cosa puede ocurrir. El segundo, que los sondeos no se equivocaron tanto hace cuatro años, porque Clinton supero a su rival en tres millones de votos y augurar su derrota con esa ventaja era más propio de chamanes que de encuestadores.

La ventaja de Biden es importante, la intensidad de la campaña de Trump en los medios es abrumadora

Hoy puede repetirse la historia… o no. La ventaja de Joe Biden es importante, pero se ha reducido en los últimos días. La intensidad de la campaña de Trump es abrumadora. Su presencia en mítines es continua y, por tanto, acapara muchas más horas de televisión que su rival desde hace una semana. Por eso, la noche electoral será apasionante, porque es imprevisible.

Si Trump gana Florida, Biden tendrá un problema serio. Si cae del lado de Biden, Trump necesitará Pensilvania

Estén atentos a Florida

La victoria dependerá de lo que ocurra en seis u ocho estados. Pero si quieren una recomendación, estén atentos a Florida. Es posible que el resultado de su votación sea de los primeros en conocerse. Si Trump gana Florida, Biden tendrá un problema serio. No significará que el candidato demócrata ya esté perdido, pero sus opciones se habrán reducido sustancialmente. Si, por el contrario, Florida cae del lado de Biden el problema lo tendrá Trump que, para empezar, necesitará imperiosamente ganar Pensilvania.

Y ahí puede llegar el choque, porque los votos por correo de este estado no se van a escrutar hasta dentro de unos días, y si el resultado fuera muy justo es posible que Trump acabe llevando este asunto a los tribunales. Algo así ocurrió en Florida en las elecciones de 2000, e hizo falta más de un mes y una larga lista de conflictos en los tribunales locales y estatales para que la Corte Suprema declarara ganador a Bush por cinco votos a cuatro. ¿Se repetirá hoy este “festival” político-jurídico? Lo sabremos pronto.