Estados Unidos

Una mujer casi muere al 'estallarle' el corazón durante un orgasmo

Un electrocardiograma realizado a su llegada reveló una hipertrofia ventricular izquierda, provocando el aumento de grosor de la pared de la cámara de bombeo principal del corazón.

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Una mujer, de 45 años, acudió a urgencias al tener un fuerte dolor torácico. El motivo de su visita al hospital fue porque mientras mantenía relaciones sexuales con su marido, al llegar al 'clímax', sintió un "estallido" en el pecho seguido de un intenso calor en la espalda.

La paciente llegó al hospital con sudoraciones, hipertensión y con una presión arterial de 220/140mmHg. Tenía dificultades para respirar y su alumbre del dolor llegaba a 10, acompañado de náuseas.

La mujer relata a 'Metro' que, en el momento que escuchó el estallido, sus piernas se encontraban presionando su pecho y tras ello, comenzó a encontrarse mal, lo que le hizo tener que desplazarse hasta el hospital más cercano de su vivienda, en Hattiesburg,Mississippi.

Tras la exploración médica y las distintas pruebas efectuadas todo parecía estar bien. Sin embargo, un electrocardiograma realizado a su llegada, el cual no detectó una disminución o detención de la circulación sanguínea a través de las arterias, sí reveló la evidencia de una hipertrofia ventricular izquierda. Es decir, la pared de la cámara de bombeo principal del corazón había aumentado su grosor, lo que provocaba el aumento de presión y la debilitación de la acción de bombeo.

Muestra de un hematoma intramural de la aorta torácica
Muestra de un hematoma intramural de la aorta torácica | Creative Commons

Lo que la mujer había sufrido fue el síndrome aórtico agudo (SAA), produciendo un hematoma intramural del arco aórtico distal y la aorta torácica descendente. Este síndrome provoca una disección aórtica, un desgarro en la capa interna de la aorta; un hematoma intramural y una úlcera que afecta a la lámina elástica interna de la aorta.

El SAA es un espectro de condiciones potencialmente mortales. Tiene una alta tasa de mortalidad, con un 1% por cada hora que un paciente no recibe tratamiento, y hasta el 22% de los casos no se diagnostican en el momento de la muerte. Es un síndrome más común entre los hombres, quienes afirman haber padecido el dolor durante las relaciones sexuales o durante la masturbación.

En un artículo de la revista 'American Journal of Case Reports', los investigadores explican que "nuestro caso es inusual porque nuestra paciente era una mujer, que representa una proporción menor de casos de SAA, y estaba teniendo relaciones sexuales consentidas con su marido; sin embargo, tenía factores de riesgo iniciales para SAA, incluida hipertensión no controlada y no tratada y antecedentes de abuso de tabaco".

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