La abstención gratis se acabó

El resultado de las elecciones generales ha dejado un Congreso de los Diputados con pactos imposibles, un Congreso más radical y fragmentado si cabe.

A Pedro Sánchez solo le quedan aquellos socios que dijo hace unos meses que le quitaban el sueño. Podemos, por su parte, parece que no tiene intenciones de rebajar sus exigencias.

La derecha ha ganado con respecto a las elecciones generales de abril pero no los suficiente porque el Partido Popular no ha llegado a los 100 escaños. Ciudadanos desaparece y ya ni siquiera es un elemento con el que contar.

Si Pedro Sánchez quiere gobernar debe saber que la abstención gratis se acabó y ahora ya no le queda más remedio que sentarse, pactar y exigencias.