Rally Dakar

La sorpresa de Carlos Sainz a su padre en el Dakar: "Se había escondido"

El piloto madrileño repasa en 'El Hormiguero' su cuarta victoria en el Rally Dakar.

Publicidad

Carlos Sainz ha hecho historia al proclamarse tetracampeón del Rally Dakar con un Audi híbrido eléctrico a sus 61 años. El piloto madrileño ha analizado en 'El Hormiguero' junto a Pablo Motos su última victoria en las dunas de Arabia Saudí.

Victoria tras su lesión: "Con la edad se disfruta más, valoras otras cosas, tienes otra perspectiva. Venía de un accidente el año pasado, donde tuve la fractura de dos vértebras. Dudé si regresar, pero me apetecía volver e intentarlo. El accidente fue en una duna por un exceso de confianza. En esa ocasión volcamos y me hice daño... Muchas veces le he dicho a Carlos que hay que intentarlo y levantarse. Era la última oportunidad que teníamos para intentar ganar el Dakar con Audi. No me he resentido nada de las dos vértebras, me he preparado bien. Cuantos más años tienes, tienes que trabajar un poco más porque cuesta más".

Muchas horas en el coche: "Personalmente lo que más sufro es cuello, el coche es una especie de coctelera en las dunas. También la zona lumbar, porque tengo un problema en un disco. El culete la verdad que sufre también, porque no llevo mucha gomaespuma para sentir el coche y cuando estás 5 o 6 horas botando te resientes. Por eso es importante llegar bien; es mejor sufrir en Madrid que sufrir allí".

Etapa 48 horas: "Había varios campamentos y te daban un saco de dormir, una tienda de campaña y una comida militar. Esta etapa lo que tenía de peculiar es que se separó el recorrido de motos y de coches, por lo que al día siguiente no tenías las huellas de las motos. El día anterior perdimos tiempo para no abrir y salir detrás. Ese día recuperamos 25 minutos, así que salió bien".

La edad, un número: "Tenía toda la confianza del equipo y de muchos amigos, también de gente de mi quinta. A los 61 años todavía hay sueños que se pueden cumplir. Es sano soñar".

Tres pinchazos en un solo día: "Físicamente he estado bien. La estrategia ha ido bien. Luego pues hemos buscado y peleado la suerte. Y hemos tenido suerte. Un día tuvimos tres pinchazos y perdimos ventaja con Sébastien Loeb. Pero yo este año antes de ir me propuse disfrutar de la carrera y no agobiarme y creo que lo he conseguido. He tratado de divertirme y me la he tomado con un poquito más de filosofía".

Su copiloto: "Le he dicho que ha sido su mejor Dakar. Lucas Cruz se ha enfadado más conmigo este año, ha estado muy contundente. Y aguantarme a mí también tiene mérito".

Un vehículo espectacular: "Audi ha sido muy valiente al tratar de ganar el Dakar con este concepto tan novedoso. Tiene cuatro motores: uno de combustión conectado a un eléctrico. Luego llevamos un motor para el eje delantero y otro para el trasero. Una de las ventajas que tiene es que no tiene caja de cambios, solo tiene freno y acelerador. No tienes que seleccionar la marcha, simplemente aceleras y frenas".

¿En qué nota la edad? "He notado la edad en que lo ves todo con otra filosofía. Si estás ahí tú crees que puedes ganar. Yo creo que los jóvenes pilotos me respetan. No soy el mismo que hace 5. 7 o 10 años. ¿En qué lo noto? Me hacen falta gafas, tienes que entrenar más y diferente, para lo que necesitas más fuerza de voluntad".

Muerte Carles Falcón: "El mundo del motor de vez en cuando te recuerda que pueden pasar desgracias. Ninguno de los pilotos que está en la salida de cualquier carrera piensa que le va a pasar algo, si lo pensase obviamente no correría. Pero es algo muy, muy duro. En el Dakar, las motos la verdad que son peligrosas".

¿Volverá en 2025? "El año que viene... déjame disfrutar de esta victoria. Tenemos tendencia a pensar enseguida en lo siguiente. Reyes [su mujer] ya me ha dado permiso, pero primero tendría que ver un proyecto que me apetezca. Si voy será para intentar hacerlo como hasta ahora, lo mejor posible".

Sorpresa de familia y amigos: "Me dieron una buena sorpresa el último día al bajar de la caravana. Detrás del coche estaba escondida mi mujer con unos amigos que fueron. Pero yo eché en falta a Carlos... no dije nada. Pensé: 'Yo hubiese ido si fuese al contrario'. Después de la especial, cuando gané y llegué al podio, el primero que estaba allí era él. Se había escondido por la mañana. Fue una gran alegría y le di un abrazo. Cuando le vi me lo tuve que tragar".

Publicidad