[[RELATEDZapatero pide el voto en Cataluña[[/RELATED El candidato de CiU a la presidencia de la Generalitat, Artur Mas, ha solemnizado a menos de 24 horas de que termine la campaña electoral su compromiso de "reconstruir" Cataluña desde la "humildad" y de mantener viva la "llama" que alimenta el sueño de disponer de una "nación plena". El marco elegido para leer su "declaración institucional" sin preguntas -último acto electoral antes del mitin final de esta noche en el Palau Sant Jordi de Barcelona- era casi más importante que el texto en sí. Con una estudiada iconografía catalanista, Mas ha comparecido en un atril al aire libre, flanqueado por Josep Antoni Duran Lleida y las nueve enigmáticas 'senyeres' que suelen acompañarle en grandes ocasiones -y cuyo significado simbólico sigue aún sin desvelar-, frente al monasterio milenario de Sant Benet, en el único acto teñido de épica de toda su campaña. Era el mismo emplazamiento en el que, el 17 de enero de 2010, Mas fue ratificado oficialmente, por tercera vez, como candidato de CiU a la presidencia de la Generalitat. Tras siete años de travesía por el desierto de la oposición, ha reconocido Mas, la gente de CiU tiene "sed", pero "no de venganza" contra el tripartito. "Nuestra sed está impregnada de espíritu positivo, de afán por superar retos, de voluntad de levantar el país, del sentido de reconstrucción que inspiró hace unos años a los impulsores de la reforma de este monasterio, de una reforma que combinó con acierto la tradición y profundidad de nuestras raíces como pueblo y como cultura y las alas que nos tienen que hacer despegar en la plena modernidad del siglo XXI", ha proclamado.