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PIDEN 55 AÑOS DE PRISIÓN

Comienza el juicio por el doble crimen de Ferrol

Comienza en la Audiencia Provincial de La Coruña el juicio por el asesinato de José Manuel y su novia Claudia. El conocido como doble crimen de Ferrol causó un enorme impacto en la sociedad, debido al ensañamiento con que fue llevado a cabo.

El fiscal pide para Manuel Antonio y Adriana una condena de 55 años de prisión como supuestos autores de dos delitos de asesinato y otro de robo con violencia. Víctor Bouzas, abogado de la acusación particular, asegura en su escrito que ambos tenían un plan premeditado para acabar con José Manuel y Claudia.

Los cuerpos de José Manuel y su novia Claudia fueron hallados, desmenbrados, desperdigados entre un bidón, una maleta y diversos plásticos en un apartado paraje con un total de 100 heridas y golpes. El 5 de septiembre de 2008 a las dos y cuarto de la tarde, Manuel Antonio Prado, y Jose Manuel discuten supuestamente por la propiedad de una furgoneta. La discusión termina en una brutal pelea. Manuel asesta a Jose Manuel múltiples golpes con un martillo y distintos machetazos hasta acabar con su vida. El presunto asesino espera en la casa del fallecido a la novia de este. Cuando la jóven entra en casa, se abalanza sobre ella. Su cadáver presentaba un total de 40 heridas provocadas por un martilllo y una afilada arma blanca. No pudo haber más ensañamiento.

Con un cuchillo empleado por el padre del presunto asesino en la matanza, él y Adriana Amenedo, su pareja, descuartizan los cuerpos y los preparan. Los sacan de la casa en una maleta y un carrito de bebé. Los trasladan hasta un lugar arbolado en el que solían parar a consumir heroína. La policía científica recoge un total de más de 100 restos biológicos. La pareja es detenida cuando viaja, junto a su hijo, un bebé en la misma furgoneta origen de la disputa.

El presunto asesino era reincidente. Ya había asesinado, 9 años antes, a un taxista. Había cumplido condena. En la cárcel estudió Derecho, pero no se rehabilitó. Allí conoció a su víctima. Se trata de un doble crimen, conocido ya como el doble crimen de Ferrol, cometido con ensañamiento y  premeditación.

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