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'Por 13 razones', 5 claves del juicio más esperado

El suicidio de Hannah no fue el final. La segunda temporada de 'Por 13 razones' arranca con el instituto Liberty High en el punto de mira, en un juicio en el que se irán desvelando más detalles del acoso escolar y de las violaciones sufridas. Hannah ya no está, pero sus amigos, sí, y, esta vez, no se van a callar. Así es el juicio que lo destapará todo.

Personajes 'Por 13 Razones'

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HANNAH, REAPARICIÓN FANTASMAL

Hannah Baker (Katherine Langford) se quita la vida no sin antes enviar a sus compañeros 13 casetes en las que relata la humillación y los abusos sufridos por otros estudiantes. Atrás queda la novela de Jay Asher (2011) en la segunda temporada, cinco meses después de aquello, pues los padres escuchan estas cintas y deciden demandar al instituto por su pasividad ante los hechos. Hannah reaparece de forma fantasmal, guiando a su ex novio Clay (Dylan Minnette), que necesita destapar la verdad. En un país en el que se produce un suicidio cada 12 minutos –más del doble de homicidios– 'Por 13 razones' cuenta esta vez con una intro en la que los actores hablan a cámara, animando a aquellos jóvenes que estén sufriendo abusos a denunciar. La voz en off ya no es la de Hannah. Los hechos son narrados por los amigos que irán testificando en el juicio.

LA AMNESIA DE ALEX

Alex (Miles Heizer) sobrevive a su intento de suicidio, aunque no recuerda nada, ni el contenido de las cintas ni siquiera su propia nota de despedida en la que se culpaba afirmando que se podía haber evitado la muerte de Hannah. Si la primera temporada impulsada por la cantante Selena Gomez servía de revulsivo, como una especie de 'Big Little Lies' de instituto, ahora describe de la mano de Alex cómo se enfrenta al día a día un joven que ha intentado quitarse la vida, pues continúan los acosadores y los que siguen callando. ¿Qué ocurrirá cuando le toque declarar si aparentemente no sabe lo qué pasó?

JESS NO ESTÁ SOLA

'Por 13 razones' ponía en evidencia que los jóvenes no saben cómo enfrentarse al sexo. Chicos que mienten, chicos que violan, chicas que aguantan y callan. El control se vuelve una ilusión y ni los profesores ni los padres ni los amigos sabrán comprender la situación de los más débiles. Ante el juicio, Jess (Alisha Boe) no sabe cómo reaccionar. Aunque está en entredicho el papel del instituto, Jess sabe que el culpable es Bryce (Justin Prentice), que actúa con ella como si nada hubiera ocurrido. Para más inri, la nueva novia de Bryce le defiende, sin saber que tras esa sonrisa encantadora se encuentra el monstruo que violó a Jess. Pero Jess no está sola, esta vez sí puede contar con sus amigos. Además, el instituto acoge a nuevos estudiantes con una forma de encarar las dificultades mucho más cañera.

PADRES E HIJOS

Clay es incapaz de olvidar a Hannah a pesar de mantener una nueva relación con Skye (Sosie Bacon), una chica extrovertida y aparentemente vital que, sin embargo, se autolesiona. A diferencia de Hannah, Skye se introduce en la familia de Clay. Los adultos, esta vez, sí están atentos ante las necesidades de sus hijos, entienden la depresión silenciosa que pueden sufrir. Olivia (Kate Walsh), la madre de Hannah, obsesionada, ha instalado un croquis de los posibles culpables en una pared. Durante el juicio, esos padres sobreprotectores descubrirán detalles inimaginables de las vidas de sus hijos. Las cintas lo comenzaron todo, pero hay mucho más por contar.

NUEVAS AMENAZAS

Las cintas se transforman en polaroids. Pero una imagen no siempre vale más que mil palabras. Una imagen puede mentir dependiendo del enfoque. Aunque el juicio comienza con Tyler, el fotógrafo, estas polaroids parecen no tener nada que ver con él. Clay se encuentra la primera de ellas en su taquilla. Los alumnos que van a testificar en el juicio comienzan a recibir amenazas de muerte. Aunque todo apunta al entorno de Bryce, algo les dice que se enfrentan a una especie de conspiración, a un secreto que se les escapa de las manos. Hannah no fue la única.

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