UNA FIESTA DIFERENTE

Pelayo Díaz y Andy McDougall: así han celebrado juntos que ya están divorciados dos años después de separarse

Dicen que el amor no se acaba, sino que se transforma, y así han querido demostrarlo Pelayo Díaz y Andy McDougall. La expareja ha celebrado una fiesta de divorcio por todo lo alto dos años después de haber separado sus caminos. Y no han dudado en dedicarse unas emotivas palabras.

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Hace dos años, Pelayo Díaz y Andy McDougall decidieron separar sus caminos y transformar la forma de quererse. Una comentada separación que ahora han celebrado por todo lo alto, firmando al fin su divorcio.

Con un post en Instagram, ambos han dejado constancia de la gran celebración que han organizado junto a sus amigos más cercanos. Con un dresscode negro, como si de un funeral se tratase, Pelayo y Andy han puesto el punto final a su historia de amor, aunque seguirán manteniendo una relación de amistad como llevan estos dos años haciendo.

Para despedirse de su matrimonio, tres años después de su mediática boda, han comprado una tarta azul en forma de corazón con la frase Just Divorced (Recién divorciados). Además, cada uno en sus respectivas cuentas se han dedicado unas bonitas palabras.

McDougall ha confesado que le daba miedo la decisión de firmar el divorcio, que no quería afrontar un momento que le removiese recuerdos felices, pero que a pesar de todo su relación ha seguido intacta: "Fuiste, sos y serás una de las personas más importantes de mi vida".

Además, el influencer ha subrayado que estará a su lado hasta como testigo de su próxima boda. Pese a que su historia no funcionó, han sabido quedarse con los buenos momentos que compartieron: "Nuestro amor se transformó y será infinito. Somos familia por siempre".

Por su parte, Pelayo Díaz también ha hecho partícipes a sus seguidores de esta celebración y ha explicado cómo se acabó el amor: "Nos daba mucha pena convertirnos en extraños y olvidar tantas aventuras, viajes y locuras juntos. Así que nos miramos a los ojos y ambos hicimos una promesa: Cuidarnos y respetarnos, y que #Pelandy no se terminara ahí".

Ahora, dos años después, han demostrado que otro tipo de ruptura es posible: "Es cierto que es un trabajo diario y que ninguno de los dos lo da por hecho la buena relación que mantenemos, pero creo que es muy positivo demostrar que las relaciones también pueden acabar de otra forma, desde el amor".