El círculo de Melissa Jiménez y Marc Bartra revela nuevos detalles de su separación

A pocas horas de la Noche de Reyes salía a la luz otra ruptura de lo más inesperada. Y es que, si bien este pasado lunes conocíamos la separación de Tamara Gorro y Ezequiel Garay, este miércoles nos hacíamos eco de la ruptura entre Melissa Jiménez y Marc Bartra.

Tras ocho años de relación, cinco de matrimonio y tres hijos en común, la ya expareja decidía poner fin a su amor, tal y como publicaba en exclusiva la revista 'Vanitatis'. Una meditada decisión que ambos habrían tomado tras una crisis sentimental que venían arrastrando desde hace un año ante la que se han visto obligados a tomar caminos por separado.

Fuentes cercanas a la pareja le han asegurado al medio mencionado anteriormente que los motivos de su separación no han tenido nada que ver ni con terceras personas ni tampoco con infidelidades. Un ''desgaste de convivencia'' en la relación habría sido la verdadera razón por la que tanto el futbolista como la periodista han decidido acabar con su historia de amor.

''No ha sido una decisión difícil de tomar. Se han querido con locura pero a veces hay que saber cuándo parar. Ha sido una ruptura amistosa'', asegura su entorno.

Tal y como también apunta su círculo, la prioridad de ambos son sus tres hijos: Gala, Abril y Max. Ese sería el motivo por el que, pese a ya vivir en casas distintas, ambos tienen sus respectivos domicilios en Sevilla: ''No quieren trastocar su mundo. Son muy pequeños y por eso vivirán en la misma ciudad. Marc viaja a jugar fuera de Sevilla cada dos semanas y vivir en otra ciudad complicaría mucho la logística'', confirman estas fuentes.

En cuanto a sus primeras Navidades por separado tras su ruptura a finales de este pasado año, el entorno de la expareja asegura que ''Melissa se ha refugiado en su familia estos días'', pasando estas señaladas fechas entre Barcelona e Ibiza en compañía de sus hijos, mientras que Marc por su parte ha tenido varios partidos con el Betis.

Ortega Cano, con su hija Gloria Camila y su hijo José María, de 11 años, en un photocall después del accidente que sufrió