La casa de Laura Escanes: Así está quedando su nuevo piso en Madrid

Tras separarse de Risto Mejide, Laura Escanes comenzó una nueva etapa de su vida: nueva pareja, nuevos proyectos profesionales y también nueva casa.

El pasado mes de febrero, la influencer compartió con ilusión la entrega de llaves del que ahora es su nuevo hogar en Madrid y, obviamente, también el de su hija, Roma. Desde entonces, ha ido mostrando a sus casi 2 millones de seguidores cada paso que da para decorar la vivienda a su gusto.

Colores y formas

Si sobre la casa de Violeta Mangriñán destacamos los colores neutros, en el caso de Laura Escanes, lo que predomina es el color.

Vestidor

El vestidor es una de las estancias que más ha mostrado hasta el momento, quizás, porque es uno los espacios más importantes de su casa, pues es donde ocurre la magia y crea los looks que tantos miles de likes acumulan.

Aparte de los armarios, llenos de ropa y bolsos, el mueble estrella de esta habitación es el espejo hecho medida que le hizo su interiorista Cristina Nogué (@cristinanoguestudio). Con el marco con ondas en tonos rosados. Ideal para hacer fotos de sus outfits.

Los colores del espejo van conjuntados con los de los cajones, como podemos ver en esta historia de Instagram en la que muestra el organizador de joyas y relojes que le ayudó a ordenar Alicia Iglesias de @ordenylimpiezaencasa.

Salón

Por ahora, del salón nos ha mostrado un rincón en el que tiene el sillón favorito de las influencers, el diseño Solomon de Westwing, en color beige claro, que va a juego con la alfombra y la mesa de centro ovalada Pietra, de la misma marca.

Al lado, para aportar un poco de color, tiene ubicada una mesita auxiliar de color lavanda con una forma original. Y para completar los toques de color, un cojín decorativo, en forma de nudo, de color verde.

Otro de los 'spots' de esta estancia, es un caballete de madera de tres patas -una rosa, una amarilla y una verde- donde Escanes va a exponer el libro de Rihanna de edición limitada que se compró hace años.

En la misma imagen también vemos las cortinas, en dos tonos de rojo y una franja dorada. Una apuesta arriesgada que aporta mucha personalidad a la vivienda. Y es que si algo no le falta a Laura es iniciativa para experimentar con colores, solo hace falta recordar todos los tintes que ha lucido en su pelo.

Dormitorio

Los colores rojos y rosas desaparecen en su dormitorio, donde reina el marrón. Pared beige claro y mesas, espejo y lámpara de madera en distintos tonos.

La ropa de cama, blanca; y los cojines, beige caqui y naranja oscuro -tirando a marrón-. Este último cojín, a juego con una manta de punto.

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