RECETA CON FRESCURA
Este es el postre perfecto para el verano: fresco, afrutado y rico en colágeno
¿Buscas un postre veraniego, saludable y fácil de preparar? Prueba este flan helado con frutos rojos, yogur y gelatina. Refrescante, ligero y lleno de sabor, es perfecto para combatir el calor sin renunciar a cuidarte.

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Con el calor lo que más apetece como postre en cada comida es algo bien fresco y a su vez sabroso. El problema es que acostumbramos a caer fácilmente en el tópico de los helados… y saludables digamos que no son. Para un capricho están bien, pero sin que se transforme en rutina diaria.
Es por eso que, en este artículo, te presentamos una receta rápida y fresca para que la disfrutes día sí y día también. Se trata de una especie de flan helado hecho con frutos rojos y gelatina. Una opción rica en colágeno y que encantará, sobre todo, a los más pequeños de la casa.
Te contamos todo lo que necesitas y los pasos que debes seguir para hacer este postre tan rico, afrutado y saludable. ¡Seguro que no te decepcionará!
¿Qué necesitas?
Estos son los ingredientes que necesitarás para la receta de flan helado afrutado:
- 200 gramos de frutos rojos o frutos del bosque congelados.
- 150 mililitros de agua
- 1 cucharadita de miel o cualquier edulcorante, el que más te guste.
- 20 gramos de gelatina neutra.
- 250 gramos de yogur.

Paso a paso
Estos son todos los pasos que debes seguir para hacer el postre del verano. Un procedimiento sencillo y que no te quitará mucho tiempo:
1. Mezcla inicial: en un cazo, junta los frutos rojos con el agua.
2. Endulza: añade la miel o el edulcorante que más te guste y mezcla bien.
3. Calienta: lleva la mezcla al fuego medio hasta que empiece a hervir suavemente.
4. Hidrata la gelatina: mientras tanto, pon las hojas de gelatina en remojo en un plato con agua.
5. Tritura: Una vez hervida la mezcla, retírala del fuego y tritúrala con una batidora hasta obtener una textura lisa y sin grumos.
6. Incorpora la gelatina: escurre la gelatina y añádela a la mezcla caliente. Remueve bien hasta que se disuelva completamente.
7. Añade el yogur: incorpora el yogur y mezcla hasta que quede todo bien integrado.
8. Vierte y enfría: pasa la mezcla a un tarro o recipiente de cristal y déjalo enfriar en la nevera hasta que quede firme.
9. Corta y disfruta: una vez cuajado, corta el postre en daditos y ¡listo para servir!

Esta es la receta ideal para el verano: rápida, saludable y refrescante. Perfecta para quienes buscan un postre ligero pero sabroso, que se prepara en pocos pasos y sin complicaciones.
Además, puedes personalizarla con tus frutas favoritas o cambiar el tipo de yogur según tus gustos. ¡Un capricho fresco que se disfruta sin remordimientos!
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