Los efectos del aire acondicionado: así afecta en nuestra piel, según las expertas

Ahora más que nunca podemos afirmar que el calor de verano ya está aquí. Ese calor insistente, el que no nos deja dormir tranquilamente y tampoco nos permite salir a la calle sin nuestro abanico preferido.

Confirmamos que hemos llegado a ese punto en el que es de vital importancia que allí donde vayamos haya aire acondicionado. Los climatizadores de este tipo ya se han convertido en ese elemento esencial para estar a gusto y sin sudar. ¡Hasta en nuestros hogares!

Aunque no es todo positivo lo que nuestro querido aire acondicionado nos aporta. Y es que a pesar de aliviarnos del calor, tiene un efecto negativo en la piel.

"No se puede hablar de un solo factor porque son varios los que influyen en el impacto del aire acondicionado sobre la piel: desde la reducción de la humedad en el ambiente hasta el contraste térmico con el exterior, pasando por una menor oxigenación del ambiente en espacios cerrados", explica Raquel González, cosmetóloga y creadora de Byoode.

Para este artículo contamos con expertas dermocosméticas que nos sugieren qué rutina facial debemos seguir para cuidar adecuadamente el rostro en estos meses tan calurosos. "En los meses en los que se abusa tanto del aire acondicionado, necesitamos una rutina de skincare a medida", añade la cosmetóloga de Byoode.

Piel deshidratada y desequilibrada

Nos gusta el aire acondicionado porque hace que el calor sea más soportable, pero lo que no sabemos tan bien es que "disminuye la humedad del ambiente y eso hace que se produzca una pérdida de agua transepidérmica en la piel. Como resultado, notamos tirantez, falta de confort, aparición de rojeces e incluso un aumento de la sensibilidad", aclara Raquel González. Todos estos efectos se intensifican conforme pasan los días y las horas bajo los aires acondicionados.

En las pieles grasas se puede producir un efecto rebote: "Al perder agua, la piel produce más sebo para compensar y la microbiota de la piel se desequilibra", cuenta Estefanía Nieto, directora técnica de Medik8.

Respecto a las pieles más sensibles o secas, las consecuencias no suelen estar únicamente relacionadas con la sequedad: "El cambio brusco de temperatura y la continua exposición al aire frío pueden afectar también a la función barrera (de la piel). Entonces puede aparecer irritación, descamación y ardor", afirma Mireia Fernández, directora dermocosmética de Perricone MD.

Marta Agustí, directora nutricional de Advanced Nutrition Programme, apostilla que justamente por eso "en estos meses de calor no debemos descuidar la hidratación y la protección de la piel cuando se pasan muchas horas con aire acondicionado".

Cosméticos que debemos usar

Una rutina de skincare adecuada es esencial para cubrir los daños que provoca el aire acondicionado en el rostro. "Lo ideal es recurrir a ingredientes que refuerzan la barrera cutánea, como los lípidos biométricos, las ceramidas o los ácidos grasos, que ayudan a preservar la integridad del manto hidrolipídico", recomienda Patricia Garín, directora dermocosmética de Boutijour.

La cosmetóloga de Byoode recomienda reforzar el skincare con antioxidantes cuando el aire acondicionado está muy fuerte: "Los radicales libres generados por el estrés térmico pueden acelerar el envejecimiento de la piel. La niacinamida, la vitamina C o los retinoides aportan una protección extra frente a este tipo de agresiones".

Una última recomendación que nos regala Estefanía de Medik8 es usar una crema oclusiva ligera para hidratar que mantenga el agua dentro de la piel: "Las texturas en gel-crema con escualano o manteca de karité en baja concentración son una excelente opción para el verano, ya que no son pesadas pero sí eficaces para conservar la humedad en la piel".

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