NovaMás» Cocina

ESTOS BELGAS TIENEN UNAS COSAS

Recetas horripilantes (o no) que lo petan por el mundo: melocotones al atún con ketchup

Te vas unos días a Bruselas esperando encontrarte ollas de mejillones, patatas fritas, croquetas de queso y alguna que otra col, y descubres que entre nuestros colegas belgas lo peta a muerte una receta que... en fin... que cada uno saque conclusiones: melocotones en almíbar rellenos de atún y ketchup. Pasen y vean.

Melocotones

Melocotones con atún y ketchup, el no va más entre los belgas. Cocinatis

Publicidad

Estás en Bruselas, escuchas las palabras 'pêche au thon' y automáticamente se despierta en ti el periodista de investigación que llevas dentro. ¿Cómo? ¿Melocotones al atún? En principio imaginas un pedazo de melocotón bio hecho con mimo a la plancha acompañando una pieza de atún de 30 €/kg, hasta que un belga que pasa por allí te explica que no, que esta receta hiperpopular en este país se elabora con melocotones en almíbar y atún de lata, además de otros ingredientes igualmente populares y asequibles entre los que destaca el ketchup.

Aprendes, además, que es un plato muy típico de allá, el típico aperitivo socorrido que elaboran los belgas cuando tienen uno de esos pica-pica en que cada uno lleva una cosa y en los que, aquí, no suelen faltar un par de tortillas y unas croquetas. Y que, dicho sea de paso, cuando lo exportan al mundo suele ser un plato incomprendido por el común de los mortales.

La receta del melocotón al atún no tiene ningún secreto, y vendría a ser una versión almibarada y algo más controvertida de los huevos rellenos. Melocotones en almíbar y atún son los ingredientes básicos, y después hay quien opta por ketchup, mayonesa o ambos para dar consistencia al atún. A partir de aquí las variantes son infinitas: hay quien les añade cebolla picada, perejil, anchoas o alguna especia, aunque la receta básica se basa en el menos es más, en un trío de ingredientes que a priori contraviene todas las reglas de la gastronomía.

A la hora de decorar, todo vale. Son muchos los que prefieren servirlos sin añadidos y después hay quien opta por un par de gambas peladas, unas huevas de salmón o, como en la foto, unas guindas. Y después está la presentación, un apartado en el que reina también la anarquía: una buena manera de servirlos es reposando sobre unas hojas de lechuga, aunque hay tantas presentaciones como cocineros de este plato.

Estos 'pêches au tone' son, pues, unos entrantes excelentes en los meses de calor, a los que a priori cuesta acercarse dada la extraña combinación de ingredientes, muy populares en Bélgica y cada vez más en otros países.

Publicidad