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EN COCTELERÍA, NO TODO VALE

Los cócteles de la muerte: cinco combinaciones que jamás deberías hacer

Igual que hay maridajes imposibles, también hay combinaciones de bebidas infames que, no obstante, llevamos años consumiendo sin habernos percatado de que son lamentables.

Cocktail

No todo vale en el mundo del cóctel. Cocinatis

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Bebidas energizantes con cualquier licor. Sabemos que es muy habitual en discotecas a altas horas de la madrugada pedir cualquier tipo de bebida energizante con nuestro licor favorito. Craso error, porque las bebidas energizantes tienen una gran cantidad de sustancias estimulantes que van a paliar los efectos narcóticos que puede llegar a tener el alcohol. Vamos a sentirnos eufóricos y despiertos, no vamos a notar los efectos del alcohol y vamos a beber más y más, de manera que cuando acabe el efecto del chutazo de cafeína nos vamos a encontrar, en el mejor de los casos, hechos un trapo, y en el peor al borde del coma etílico. Muchísimo cuidado.

Licores blancos y licores oscuros. Mejor no combinar en un mismo trago licores de alta graduación oscuros, como el whisky o el ron, con otros claros, como la ginebra o el vodka, especialmente si sufrimos de problemas digestivos. Su combinación puede provocar acidez estomacal.

Ginebra con naranja o cola. Ahora el gin-tonic ha ganado la batalla, pero hubo un día en que mezclábamos con total alegría ginebra con refresco de naranja o cola. Y esto es un gran error, ya que la ginebra es un dechado de olores, sabores y matices, dada la complejidad de su composición, y lo que nos interesa es no enmascararlos con bebidas muy azucaradas y con un sabor muy fuerte, como son la naranjada, la cola o incluso la limonada. Por ello, la tónica sigue siendo su mejor amiga, ya que nos va a permitir disfrutar del enebro y de un trago fresco, elegante y lleno de matices. No ocurre lo mismo con el vodka, un licor de sabor neutro al que sí podremos añadir sin problema un toque de cola, naranja o limón si nos apetece.

Ojo con los sours. Ahora están de moda y al tradicional Pisco Sour se ha añadido en primera línea el Whiskey Sour o incluso el Gin Sour. En el universo Sour, que consiste en añadir ácido y azúcar a los licores mediante el uso de limón o lima para lograr un toque agridulce, estamos viendo cosas como el Amaretto Sour, empalagoso donde los haya. Cuidado, pues, con la versión Sour de las bebidas excesivamente dulces.

Nunca un lácteo en un cóctel. Habrá quien nos quite la razón, porque al fin en el universo de la coctelería todo vale siempre que al consumidor le guste, pero nos parece un error garrafal utilizar cualquier lácteo en coctelería, desde las cremas de licor a los batidos, como el de chocolate, tan popular en una época. Suelen ser pesados en combinación con otros ingredientes, y, aunque no creamos en la leyenda urbana de que mezclarlos con según qué va a llevarnos directamente a la tumba, es cierto que es mejor evitarlos y sustituirlos por licores más ligeros y fáciles de combinar.

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