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El ciclo de la vida

¿Bulo o realidad? ¿Hay avispas muertas en los higos?

El fruto de la higuera, tan carnoso y dulzón, esconde un secreto en su interior. Para que los higos puedan llegar hasta nuestra mano deben pasar un proceso de polinización especial en el que las avispas son las protagonistas: polinizan el higo macho y mueren al tratar de salir. Entonces... ¿Ingerimos avispas cada vez que comemos higos?

¿Avispas muertas en los higos?

¿Avispas muertas en los higos?Pixabay

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Durante las últimas semanas, un hilo de mensajes en Twitter afirmaba que consumir esta fruta también es ingerir avispas muertas.

Las hembras se introducen dentro del higo macho –que es una flor invertida, y no un fruto, y no se consume- para depositar las larvas. Al entrar, rompen sus alas y antenas y acaban muriendo dentro. Cuando las larvas nacen, estas nuevas avispas se llevan consigo el polen de la higuera ayudando a su polinización. Hasta ahí todo bien, ya que es lo que se conoce como simbiosis, donde ambas especies se benefician.

El problema surge si durante el proceso estos insectos se introducen de forma accidental en un higo hembra, el fruto que sí comemos.

¿Avispas muertas en los higos?

Cuando las abejas, confundidas, acceden al higo hembra no tienen espacio para poder reproducirse. Intentan salir inmediatamente por el agujero natural que posee el higo y, al ser tan estrecho, sus alas y antenas se rompen. Por lo tanto, mueren en el interior del fruto.

¿Comer higos es comer insectos?
Mariano Sánchez, conservador del Real Jardín Botánico de Madrid, responde: "No tiene nada que ver, se trata de una simbiosis que beneficia a ambas especies". El conservador habla del símil del suelo: "Cuando un ratón muere y se descompone, es absorbido por las raíces de la planta y nadie diría que estamos comiendo carne al consumir la planta o su fruto".

No comemos insectos, según explica, por qué en el caso de que una avispa se confunda de fruto y muera en el higo que sí nos comemos (el hembra) sus cuerpos muertos se descomponen dentro del fruto gracias a la ficina, una enzima del fruto que convierte al insecto en proteína. Así que no estas comiendo avispas: "Los higos que se comercializan se reproducen mediante, esquejes así que no necesitan ser polinizadas" añade Sánchez.

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