No hay precedentes de un temporal igual. Los ríos no tienen capacidad de desagüe para todo el agua que ha caído en las últimas horas en la zona del Levante. El agua arrastra barreras de cañas y residuos y no puede seguir su curso natural.
Vecinos y alcaldes apuntan a que la falta de limpieza de los ríos podrían haber contribuido a su desbordamiento. Cañas, vegetación y lodo ayuda a que rebose el cauce. Además, toda esa suciedad acaba en las calles y tapa desagües y alcantarillas, provocando más inundaciones.
En el río Segura, en su paso a Murcia, operarios han tenido que retirar ramas y vegetación del cauce a las proximidades de los puentes.
Sin embargo, el Presidente de la Confederación Hidrográfica Segura, Mario Urrera, asegura que "aunque de estos ríos hubiera estado impoluto, la cantidad de agua es tan brutal que no habría habido cauce suficiente".
Así ha ocurrido en el río Segura, que su caudal ha alcanzado niveles históricos. Ha pasado de 0,5 a 230 metros cúbicos por segundo, es decir, su caudal se ha multiplicado por 400.