Desaconsejan consumir el agua de grifo por un problema con la desaladora en Castellón

Un bando municipal ha desaconsejado a los vecinos de Benicàssim y Oropesa del Mar (Castellón) consumir y utilizar agua del grifo por un problema con la planta desaladora. El aviso se comunicó hace tres días y el problema todavía no se ha solucionado, lo que afecta a 10.000 vecinos solo en Oropesa.

Un equipo de Antena 3 Noticias ha preguntado a habitantes de la zona. "Nos dijeron que tardaría 24 horas", denuncia uno de ellos. Hasta ahora han tenido que comprar agua mineral para poder sustituirla, ya que acciones diarias como lavar fruta o verdura no están recomendadas. "El miedo que tengo es que se haga más acopio de agua mineral para beber y se nos agote", confiesa otro. Algunos se enteraron por WhatsApp y otros por publicaciones de redes sociales, como estos en los perfiles de Facebook de los ayuntamientos de ambas localidades.

El agua potable debería volver pronto

"No es grave para la salud, pero sí hacemos esta recomendación", sostienen las autoridades, que también han asegurado a EFE que están esperando el informe de la Conselleria de Salud Pública sobre el estado del agua. El resultado previsiblemente llegará en las próximas horas y se podría así restablecer el uso habitual. Hasta que este aviso no esté confirmado, los vecinos deben seguir evitando su uso para beber o cocinar.

Ambos ayuntamientos apuntan a que fue la turbidez de origen mineral de la red de agua domiciliaria lo que hizo saltar las alarmas, pero se ha asegurado que "el resto de parámetros presentan valores normales".

Este no es el único caso de este estilo. En octubre de 2020 se prohibió a vecinos de Pontedeume, en A Coruña, beber agua de la red municipal, también potable como esta. El ayuntamiento indicó que no había motivos para preocuparse, aunque se registraron restos de óxido y altos niveles de turbidez.

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