El secretario general del grupo parlamentario de Ciudadanos, Miguel Gutiérrez, considera "lamentable" que el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, esté "mirando al techo" esperando que no se pueda formar un gobierno y haya que convocar nuevas elecciones.
Tanto PP como Podemos están "de campaña electoral" apostando por el "fracaso"
En rueda de prensa en el Congreso, Gutiérrez se ha referido así a las palabras de Rajoy captadas por un micrófono en la cumbre europea de Bruselas, en las que no cree que el líder del PSOE, Pedro Sánchez, vaya a tener éxito en su investidura y ya vislumbra nuevas elecciones generales para el 26 de junio.
"La inacción del presidente es evidente, a lo mejor es que está muy satisfecho de no haber hecho nada", ha ironizado Gutiérrez. Para el dirigente de Ciudadanos, tanto el PP como Podemos están "de campaña electoral" apostando por el "fracaso" y para que no se consiga un acuerdo de gobierno y haya que convocar nuevos comicios. Gutiérrez también ha criticado la oferta del PP de una Vicepresidencia para Albert Rivera en un hipotético gobierno de gran coalición junto al PSOE.
"El PP se pone al nivel de Iglesias que ofrece presidencias cuando no toca", ha bromeado. A su juicio, Rajoy parece haberse despertado de un "sueño" y se ha dado cuenta de que su estrategia es un "error" pero ahora "no se puede echar para atrás" y "comprometer la figura del Rey", ha alertado.
Frente a la actitud del PP y Podemos, Ciudadanos ha apostado por el proceso de negociación abierto con el PSOE que tiene como único objetivo "lo mejor para los españoles" lo que, en su opinión, es lo "honesto" desde el punto de vista político. "Para mí es un fracaso que no se pueda llegar a un gobierno y devolverle la pelota a los ciudadanos", ha insistido Gutiérrez, que ha subrayado que su partido está trabajando para que no se pueda culpar a Ciudadanos de ese fracaso.
Preguntado por las críticas del portavoz del PP, Rafael Hernando, al papel que está jugando el presidente del Congreso, Patxi López, Gutiérrez ha recordado que cuando se acordó su nombramiento se pensó que sería bueno que el presidente de la Cámara fuera de un partido distinto al del Gobierno, pero después Rajoy renunció a la investidura. "Quien tenía la opción de ser presidente era Rajoy y por eso tenía todo el sentido que el presidente del Congreso fuera de otro color político. Lo que no podíamos imaginar es que su propio presidente iba a decir que no. (..) Ahora lo que no puede hacer es quejarse", ha zanjado.