En Güímar viven su día grande con la Baja del Socorro. Con un siglo de existencia, es una de las romerías más antiguas de Canarias. Acompañan a la virgen hasta la playa donde fue encontrada.
Resuenan los bucios.
También los acordes de las parrandas.
Las calles de Güímar se convierten en ríos de peregrinos que acompañan a la imagen de la Virgen del Socorro. Seis kilómetros de trayecto por asfalto y tierra de volcán bajo un sol de justicia y más de 30 grados que algunos por promesa recorren descalzos.
Los hay que desde hace décadas peregrinan.
Otros que se suman hace poco a esta centenaria romería.
Lo hacen con un gajo de albahaca en la mano tal y como mandan la tradición. Y si alguien se olvida siempre hay quien lleva demás.
Y si en el camino no hay tramo sin peregrinos intentar alcanzar la ermita del Socorro es misión imposible aquí esperan con impaciencia más de 100.000 personas una jornada festiva que mañana se repite con la subida.
Y en San Sebastián de la Gomera se celebró en la tarde de ayer el acto institucional de las Jornadas Colombinas. En ellas se recuerda el paso de Cristobal Colón por la Gomera y el papel que tuvo la isla en el descubrimiento de América. Al acto acudió el Presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, el presidente del Cabildo de la Gomera, Casimiro Curbelo y el rector de la Universidad de la Laguna. La música la pusieron los Sabandeños y como todos los años, no faltó la ofrenda con la corona de laurel a los desaparecidos en el Mar.
