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RED BULL Y MCLAREN, LOS RIVALES
Alonso y el F138 buscan dar la primera alegría a Ferrari tras cinco años de sequía
Fernando Alonso tiene en su mano y en el volante del F138 poner fin a una mala racha de Ferrari que ya dura cinco años. Como hiciera Michael Schumacher en el 2000, logrando el título de pilotos tras 21 años sin éxitos individuales, el asturiano está ante la opción de tomar el testigo de Raikkonen como último campeón de la 'Scuderia' y de entrar en la historia de Maranello.
Sexto intento para Ferrari. Sexto intento para los de Maranello en su misión de volver a ver a un piloto de su escudería alzarse con el tan ansiado Mundial. Un Mundial que se resiste, un Mundial en el que los monoplazas rojos han visto cómo el predominio que lograron gracias a los títulos de Schumacher se disipa y cómo Red Bull y McLaren les han comido el terreno.
Y para recuperarlo está el F138. Está el sustituto del F2012, un F2012 que sólo pareció dar resultado en manos de Fernando y que gracias al asturiano pudo sobreponerse a toda adversidad para liderar contra todo pronóstico la tabla de pilotos y caer ante el todopoderoso Red Bull de Vettel en la última carrera del Mundial por sólo tres puntos.
Para evitar eso es para lo que ha nacido este F138, un F138 sin el tan llamativo morro escalonado, o 'morro de pato'. Un F138 que tiene la difícil misión de vencer y convencer desde el primer día, de demostrar que en Maranello no se han olvidado de crear monoplazas y de hacer que o bien Alonso o bien Massa resulten campeones del mundo.
Porque seis años son demasiados para una escudería acostumbrada a ganar siempre. Desde el 2007, con Raikkonen aprovechando la guerra interna entre Alonso y Hamilton en McLaren, los de Ferrari no saben lo que es celebrar un Mundial, aunque Fernando ha sido quien más cerca ha estado con dos subcampeonatos.
'Triplete' de Red Bull
En 2008, y con Alonso de retorno a Renault, no fue Kimi, sino que fue Massa el que estuvo a punto de lograr el título. Pero Hamilton se lo arrebató en la última curva de la última vuelta de Brasil al pasar al Toyota de Glock y cuando el brasileño ya celebraba el triunfo en su país.
En 2009 fue Jenson Button con el Brawn, el polémico Brawn, el que logró el título ante la impotencia de un Ferrari en el que Raikkonen 'no estaba al cien por cien y en el que Massa no pudo competir por un accidente. Y ya sin Kimi, realmente sin Kimi, llegó la 'era de Alonso' a Ferrari. Y la de la supremacía de Red Bull y de Vettel, campeón en 2010, 2011 y 2012.
Sin ganar desde 1979 hasta el 2000
Esta no es, ni mucho menos, la peor racha de un equipo que en los 53 años de la más alta competición ha levantado un total de 17 veces el Mundial de pilotos, desde que Alberto Ascari lograra el primero en 1952 hasta que Kimi Raikkonen consiguiera el último en 2007. Y es que en Ferrari han visto muchas épocas de vacas flacas.
Porque en la 'Scuderia' han llegado a estar hasta 21 años sin tener nada que celebrar, una celebración que se hizo esperar desde 1979, con Jody Sheckter al volante, hasta el año 2000, con un Michael schumacher que lograría el primero de sus siete títulos mundiales. Poco se pudo hacer para competir con McLaren, con Benetton y con Williams... y con Senna y Prost.
Pero no sería la única mala racha italiana. Porque del 1964 hasta 1975 tampoco saborearon las mieles de la victoria. Desde que John Surtees levantase el título de pilotos los Lotus-Ford y demás equipos hicieron estériles todos los intentos desde Italia para tener un campeón, campeón que volverían a tener gracias a Nicky Lauda.
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