El expresidente de Pescanova Manuel Fernández de Sousa reclama 663.119,26 euros según la demanda presentada contra la multinacional gallega por un supuesto despido improcedente contra la compañía gallega y contra Deloitte. El Juzgado de lo Mercantil número uno de Pontevedra ha acogido el juicio al que no ha asistido él pero sí la abogada que lo asiste, y que ha quedado visto para sentencia.
La representante jurídica del expresidente de Pescanova, sostiene que de Sousa ha sido trabajador de la firma gallega, fundada por su padre, y de la que lleva trabajando desde 1977, hasta que presentó su dimisión como presidente de la compañía el pasado julio y por lo que solicitó una indemnización de "veinte días por año trabajado". La abogada también ha aportado el testimonio de Olegario Casal, quien declaró que de Sousa "tenía dedicación plena a la empresa".
Ante esto los letrados de Pescanova han pedido que se considere este proceder como "una temeridad" y se tenga en cuenta las circunstancias en las que se ha presentado la reclamación de este dinero, que equivale a 55.266 euros al mes. "No hay base para el despido porque no hay relación laboral", han dicho desde la empresa. Entre otras pruebas entregaron la carta de dimisión escrita por Fernández De Sousa, "en la que él mismo así lo admite".
El expresidente de Pescanova percibía de la empresa casi un millón de euros al año. En concreto, 989.000 euros por su puesto ejecutivo como presidente, según los datos que figuran en el informe del Gobierno Corporativo el último ejercicio disponible.
Por su parte, Fernández de Sousa está imputado por falseamiento de información económico-financiera, de las cuentas y por uso de información relevante.
