Tom Selleck sorprende con un irreconocible look a los 80 años

No hay bigote más famoso en el mundo de la televisión que el de Tom Selleck. La estrella de Magnum, P.I. y, por supuesto, el eterno Richard de Friends dejó un legado imposible de borrar en la pequeña pantalla. Una figura al que la elegancia lo ha acompañado en cada papel. Sin embargo, el tiempo pasa para todo el mundo.

Su última aparición en pantalla fue con la serie Blue Bloods que, tras catorce años en emisión, llegó a su final el pasado 2024. Como de costumbre, Selleck encarnaba a un policía, recuperando el rol que lo dio a conocer en la década de los 80.

Ahora bien, Selleck ha sido recientemente captado por unos fotógrafos mientras hacía unos recados en la ciudad de Los Ángeles. Unas imágenes que nada tienen que ver con el estilo habitual del actor: ni tan siquiera hay rastro de su característico bigote.

A sus 80 años, el protagonista de Magnum luce una larga barba blanca, así como un peinado que poco recuerda al que suele llevar cuanto está bajo los focos. De igual modo, el look deportivo contrasta directamente con los trajes que tiende a vestir frente a las cámaras.

Las fotos son el mero reflejo de la vida de Selleck alejado de la industria, quien se ha pronunciado en varias ocasiones sobre lo que piensa de su nueva apariencia: "No puedo estar igual que hace 20 años", comentó para GQ, "y no quiero que ningún cirujano intente que lo esté".

Tom Selleck recuperará próximamente su papel de Jesse Stone, otro policía que lo ha llevado a protagonizar hasta nueve películas de televisión. Por lo que, con total probabilidad, el actor no tardará en recuperar su mítico bigote.

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