Qué es y cuándo utilizar el ácido salicílico

Cada tipo de piel necesita un cuidado específico. Por ese motivo, no debes usar los mismos productos si tienes la piel seca o si la tienes grasa, ya que puedes conseguir justo el efecto contrario que deseas. Así, las personas con la piel grasa son más propensas a tener granos, brillos y puntos negros que son tratables con productos que ‘secan’ un poco la piel. El ácido salicílico puede ser una gran opción si quieres librarte del exceso de suciedad en tu piel. En este vídeo te contamos qué es y cómo utilizarlo.

El ácido salicílico es un compuesto químico que se obtiene a partir del dióxido de carbono y el fenóxido de sodio. Se utiliza como aditivo en muchos productos para el cuidado de la piel ideados para acabar con las espinillas, el acné, la psoriasis o los puntos negros. Su efecto ácido hace que las células de la piel “se caigan” más fácilmente y no obstruyan los poros de la piel. De este modo es más difícil que la grasa se acumule bajo la piel y aparezcan los molestos granitos.

También podemos encontrarlo en champús diseñados para tratar excesos de grasa en el cabello, como la caspa y en otros productos con el mismo fin. Sin embargo, hemos de ser precavidos y no usarlo en exceso. Es un ácido y, como tal, puede dañar nuestra piel a la larga. De hecho, el uso directo de una solución salicílica puede causar hiperpigmentación en la piel, sobre todo en aquellas personas que tienen un tono oscuro.

En este vídeo te contamos exactamente qué es el ácido salicílico y cómo y cuándo debes utilizarlo sin peligro. Es indispensable seguir todas las recomendaciones que aparecen en el prospecto de los productos que lo contienen y, en caso de ver reacciones adversas en tu piel tras utilizarlo, dejar de emplearlo y acudir al médico.

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