LUCHA CONSTANTE
Qué le pasó a Marta Pérez, la joven de 19 años en estado vegetativo por una alergia a los frutos secos
Marta Pérez, una joven de Ibi (Alicante), sufrió un grave daño cerebral tras ingerir un batido con pistacho, al que era alérgica. Desde entonces, permanece en estado de mínima conciencia, pero su familia no ha dejado de luchar por su recuperación.

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El 28 de septiembre de 2022, Marta Pérez, una joven de 19 años de Ibi (Alicante), vivió el que sería el día más inesperado de su vida. Después de hacer deporte en el gimnasio, decidió tomarse un batido de proteínas. Aunque preguntó expresamente por su contenido, le dijeron que no había pistacho, ya que era alérgica. Sin embargo, el resultado fue devastador. Poco después, sufrió un choque anafiláctico que desencadenó una parada cardiorrespiratoria y la sumió en coma.
Atendida inicialmente en el centro de salud de Ibi, la gravedad de su situación obligó a trasladarla al Hospital Virgen de los Lirios de Alcoy. Allí, los neurólogos le dieron escasas posibilidades de mejora y su madre, María Verdejo, denunció repetidas negligencias y falta de empatía: se sentían ignorados por el personal y las reclamaciones que presentaban eran contestadas con evasivas.
Tras meses en un estado crítico, Marta fue trasladada a la Unidad de Neurorrehabilitación del Hospital Consuelo de Valencia donde, por primera vez, comenzaron a verse tímidos avances.
Estado actual en 2025
Actualmente, Marta tiene 21 años y permanece en un estado de conciencia mínima. No obstante, los últimos meses han traído novedades esperanzadoras. Desde marzo de este año, está recibiendo tratamiento ambulatorio en la clínica Klinik PM, cercana a Ibi, tras una decisión del Hospital Virgen de los Lirios.
Una de las herramientas clave en su proceso de rehabilitación es la máquina R-Gait, un avanzado sistema de rehabilitación robótica diseñado para ayudar a pacientes neurológicos a recuperar el patrón natural de la marcha. Este dispositivo simula de forma controlada y progresiva el acto de caminar, activando los músculos y articulaciones de las piernas, aunque el paciente no tenga fuerza voluntaria suficiente.
Además, a principios de este mes ha comenzado también a utilizar Xtone, un dispositivo de estimulación muscular magnética de última generación que ayuda a mejorar la fuerza, la tonicidad y la movilidad muscular. Esta tecnología permite activar grupos musculares profundos sin necesidad de esfuerzo voluntario, algo esencial para pacientes con movilidad reducida.
La conmovedora lucha
Estos avances han sido posibles gracias, en parte, a la lucha incansable de su madre. En enero de este año, María organizó varias protestas en el Hospital de Alcoy para exigir la continuidad de la rehabilitación una vez Marta fue dada de alta en Vithas Valencia Consuelo. Las protestas surtieron efecto y, finalmente, autorizó que Marta pudiera recibir tratamiento especializado sin necesidad de largos y agotadores desplazamientos.
La familia sigue totalmente volcada en su recuperación. A través de su web, organizan campañas de recaudación de fondos, desde la venta de pulseras solidarias hasta eventos benéficos. También mantienen una fuerte presencia en redes sociales, con más de 41.000 seguidores en Instagram y más de 82.600 en TikTok, donde comparten vídeos que documentan cada pequeño avance.
Marta aún enfrenta un largo camino de recuperación, pero el compromiso de su familia, la tecnología médica y el apoyo social están logrando lo que parecía imposible: devolverle poco a poco la conexión con el mundo.
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