Guillermo reaparece con su hijo George, visiblemente más maduro en medio de este difícil momento familiar

En medio de la complicada situación que vive la Corona de Inglaterra, con Carlos III luchando contra un cáncer al igual que Kate Middleton, el príncipe Guillermo y su hijo mayor, el príncipe George, han acudido a la final de la FA Cup masculina entre el Manchester City y el Manchester United.

Ambos se dejaron ver en el palco del estadio de Wembley, para sorpresa de muchos pues apenas unos días antes, medios como People habían informado que el rey Carlos y su hijo habían cancelado sus agendas tras la convocatoria de elecciones generales por el primer ministro británico, Rishi Sunak.

La presencia del primogénito de los príncipes de Gales, George, de 10 años, ha llamado la atención de muchos por sus gestos calmados y de serenidad a tan corta edad, demostrando mucha madurez.

Sin duda, un paso al frente necesario del heredero del heredero en una imagen que contrasta con las que suelen protagonizar sus hermanos la princesa Charlotte, de 8 años y el príncipe Louis, de 6, mucho más revoltosos.

De esta manera, los dos sucesores principales al trono de Inglaterra han compartido afición y refugio en el fútbol. Una fuente le señaló a People que dentro del drama familiar, el Príncipe "se ha sentido enormemente animado por los resultados del Aston Villa", su equipo, y que "no se debe pasar por alto la importancia del fútbol en estos momentos".

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