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LA CROMOTERAPIA APLICADA AL VINO ESTÁ DE MODA

Dime qué vino te gusta y te diré qué males va a curarte

La terapia del color es una pseudociencia que nos insta a observar el color del vino antes de tomarlo, ya que éste influye decisivamente en nuestras emociones.

vino azul

A este vino azul le ha salido competencia: un vino naranja. Cocinatis

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Todo nos entra en un principio por la vista. Hasta el vino. Es el primer contacto que tenemos con la copa de vino y nos da pistas de lo que hay en el interior. ¿Habéis probado de adivinar con los ojos tapados el color de un vino? Y es que es normal que el vino blanco os recuerde a fruta y flores blancas, igual que el tinto por semejanza os lleva a pensar en fruta roja o negra. En la era 'new age' se dice que el rojo ayuda a superar pensamientos negativos, estimula y calienta el cuerpo, ayuda a sentirse con más energía e incrementa la circulación sanguínea. El rosado parece que te hace ver la vida de color de rosa, ¿no es así?. Pues sí, ya que ayuda a pensar positivamente, sin miedos ni restricciones y da confianza. Por su parte, el color amarillo del vino blanco podría ayudar a mejorar la concentración y a estimular el cerebro.

De acuerdo con la terapia del color, éste ejerce una influencia emocional en las personas que permite generar un estado que permite la sanación de enfermedades y el restablecimiento de sus desequilibrios. Esta pseudociencia remarca la importancia de echar un vistazo en el vino antes de tomarlo. Y más ahora que las últimas modas de enología y de consumo parecen ensanchar la gama de colores, con dos nuevos que antes no ligábamos al vino: el vino naranja y el azul.

El preciado 'orange wine' está hecho con uvas blancas que han tenido mucho tiempo de maceración con sus pieles, histórico en Armenia y Georgia que ahora han adoptado los italianos de la región Friuli-Venezia-Giulia y que también se produce en Eslovenia, Francia, Alemania, Nueva Zelanda y California. Hay una serie que se llama 'Orange is the new black' y parece que algunos sumilleres eligen este vino con notas de oxidación para maridajes con mucha personalidad.

El vino color océano se consigue a través de colorantes naturales sintetizados en el momento de la fermentación y tiene más detractores que fans porque, aunque se hace con uva, tiene un sabor dulce y es una novedad de una marca en Rioja, de manera que los más puristas no lo quieren dentro del olimpo enológico.

Para poder observar como es debido el color de un vino se necesita:

1) Tener un fondo blanco servilleta, folio o mantel para poner encima la copa y poder dictaminar su color

2) Copas limpias: para que podamos ver la limpidez del vino

3) No servirse más de un tercio. Así cuando inclinemos la copa a unos 45 grados no se nos caerá el contenido

4) Buena iluminación para poder ver los reflejos del vino. El color del vino junto a los reflejos y el ribete nos indica su grado de evolución. Los blancos jóvenes empiezan con colores casi incoloros, amarillos pálidos y pajizos, con notas verdosas. Los colores ambarinos y amarronados nos están diciendo que es un vino blanco viejo o tal vez algún vino licoroso.

De hecho, todos en esta vida queremos ser lo que no somos: el blanco con el tiempo quiere ser tinto y el tinto se vuelve más claro con la edad. Los tintos empiezan muy tupidos, con colores cercanos a los morados y púrpuras, es decir con mucha mezcla de azul en el rojo. Al cabo de un par de años, sobre todo los que ya han pasado por barrica, cogen tonalidades más cereza, granate y carmín, y cuando el color se vuelve teja es que estamos ante un tinto envejecido.

En los rosados las primeras gamas son rosas grises, rosas claros con reflejos violáceos, cerezas. Depende de la variedad y el tiempo de maceración de la piel los rosados son más grosella, frambuesa o piel de cebolla. Con el paso del tiempo estos colores típicos de los rosados jóvenes se transforman en color salmón.

Pero ojo, no confundir los rosados con el vino naranja. La cromoterapia diría que este color influye en la fuerza física y ayuda con los problemas de introversión… ¡como todos los vinos!

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