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¿Chupas las cabezas de las gambas o langostinos? La razón por la que no deberías hacerlo

Porque es malo para la salud y no debes seguir haciéndolo.

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Las gambas o los langostinos son alimentos muy típicos en cualquier hogar de nuestro país. Conforman una posibilidad de comer marisco en tu propia casa, pero no de una manera excesivamente cara y sin tener acudir a un restaurante para degustarlo.

Un alimento muy versátil

Son una gran fuente de proteínas para el consumidor y es por ello que tienen la capacidad de saciar al estómago. Además, ofrecen una gran versatilidad en el mundo de la cocina ya que permiten integrarlos en platos y recetas como ensaladas, cócteles o arroces.

A la hora de ingerir estos productos, lo más habitual suele ser prepararlos a la plancha durante no mucho tiempo para después sazonarlos con un poco de limón lo que le aporte un gusto que le va muy bien al marisco. De esta manera, cuando los vamos a comer se puede aprovechar toda la materia prima que este alimento ofrece porque al cocinarlos casi no lo hemos manipulado.

Por qué chupar la cabeza es malo

Aquí es cuando, al comerlos, hay mucha gente a la que le gusta acabar chupando la cabeza para disfrutar del gran gusto que posee. El hecho de que esta práctica se haya convertido en tan habitual, ha provocado que ni se nos pase por la mente que esto podía ser perjudicial para la salud.

Es cierto que tanto los langostinos como las gambas son alimentos muy ricos en ácidos grasos como el omega 3. Pero a lo que no escapan es a contener un alto nivel colesterol, y especialmente la cabeza.

Por ello, si chupamos la cabeza de estos productos, estaremos incrementando el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares propiciadas en su mayoría por tener una gran cantidad de colesterol en el cuerpo.

Así que ya vemos que, si nos acostumbramos a comer marisco sin la tentación de chupar la cabeza de las gambas y langostinos, nuestra salud nos lo agradecerá.

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