Ahogamientos playas
El síndrome del 'ahogado invisible': 23 niños han muerto por ahogamiento en lo que va de año
“El niño o la niña bucea, hace movimientos espasmódicos debajo del agua, pensamos que está jugando y lo que está es iniciando el proceso de ahogamiento”, explica Sebastián Quintana, presidente de la Asociación “Canarias 1500km de Costa”.

Publicidad
En lo que va de año han perdido la vida cerca de 250 personas por ahogamientos en España, la mayoría de ellas por cometer imprudencias en la playa. Junio de 2025 ha sido el mes más letal desde hace una década con 73 fallecidos, o lo que es lo mismo con una muerte por ahogamiento cada diez horas. El 80% son hombres de edades comprendidas entre los 45 y los 74 años, con dos perfiles muy concretos.
Por un lado, el español con el conocido como “Síndrome del la inmortalidad”, es aquel que vive en la zona o la frecuenta y cree dominar las corrientes y por ello se baña en zonas peligrosas. Por otro lado, el ejemplo contrario es el turista que viene de vacaciones y no conoce las normas, el oleaje o las corrientes y se baña de forma temeraria, ese es el “nadador inconsciente”.
La cifra de niños y niñas ahogados es también alarmante, entre 40 y 50 al año. El 30% de ellos muere por el “Síndrome del ahogado invisible”: “el niño o la niña bucea, hace movimientos espasmódicos debajo del agua, pensamos que está jugando y lo que está es iniciando el proceso de ahogamiento”, explica Sebastián Quintana, presidente de la Asociación “Canarias 1500km de Costa”. En estos casos, los niños están en algunas ocasiones en piscinas o zonas acuáticas, rodeados de muchas personas pero ninguna se da cuenta de lo que ocurre. Hay que extremar la vigilancia: “hay que actuar inmediatamente, cogerlo de las axilas y sacarlo del agua. Ese niño o esa niña se está ahogando”, añade Quintana.
Prestar atención a las banderas
Los socorristas advierten de que lo primero que hay que hacer al llegar a una playa es mirar la bandera. Tas preguntar a diferentes usuarios de varias playas canarias si conocen la normativa: “en verde no hay peligro para el baño, en amarillo hay que tener precaución, y rojo prohibido el baño”, dice un joven. “Si está la bandera roja, ni se me ocurre”, dice otro señor.
La teoría de las banderas la conocemos casi todos, pero igual de importante es conocer la playa y sus corrientes, o preguntar a los socorristas antes de bañarnos: “donde siempre es mejor bañarte es donde veas salir la ola, donde veas la espuma, porque la espuma te saca hacia la orilla", dice Juan Manuel Dávila, coordinador de socorristas en la playa de Melenara en Gran Canaria. "Donde no veas ola, ahí es donde hay que tener cuidado porque es donde suelen estar las zonas de corriente”, recalca.
Las corrientes preocupan a muchos usuarios, y es que una de las usuarias preguntadas aseguraba que su sobrino "se encontró con un remolino en medio del agua”. Otra de ellas explicaba que hay que tener respeto al mar porque “te puede arrastrar la corriente para dentro y creo que hay que tener mucha precaución”.
Más Noticias
Ante una situación de peligro
¿Qué debemos hacer si ya estamos dentro del agua y nos vemos en apuros?. “Mantenernos a flote e intentar llamar la atención de alguien”, respondía un bañista. Y es que efectivamente, si nos vemos arrastrados por la corriente, debemos levantar las manos para que nos vea el socorrista y no nadar a contracorriente: “Nunca hay que luchar contra la corriente porque la mayoría de los ahogamientos son por cansancio”, explica el socorrista. También es importante bañarse en playas vigiladas y evitar las que no tienen servicio de socorrismo, y sobre todo aplicar siempre el sentido común.
Publicidad