Rusia responde a Joe Biden exigiendo que la OTAN se comprometa a no admitir como miembro a Ucrania

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ya ha advertido a Rusia de que si se atreve a cercar a Ucrania y adentrarse en el país, por muy pequeña que sea la incursión, será considerado como una invasión, y por lo tanto, podrá aplicar grandes sanciones económicas, puesto que tiene casi descartada una intervención estadounidense tras el desastre militar de Afganistán.

Rusia se mantiene en sus trece y exige a Biden que cumpla con sus garantías, dando la palabra de que la OTAN jamás admitirá a Ucrania como miembro y que la Alianza evite una expansión al este. El motivo no es otro que un mayor aislamiento que el presente, puesto que Rusia ha perdido gran relevancia desde que se disolvió la Unión Soviética.

Ahora, ha sido China quien se ha posicionado como principal alternativa a Estados Unidos, y la pérdida de influencia mundial de Rusia no ha hecho la menor gracia a Vladimir Putin, que no ceja en su empeño de recuperar el viejo imperio soviético, de cuya disolución se cumplieron 30 años el pasado 31 de diciembre de 2021.

Cumbre clave este viernes

Este viernes habrá una reunión trascendental en la ciudad de Ginebra (Suiza), donde se reunirá el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, con el ministro de exteriores ruso, Serguéi Lavrov, donde tratarán esta escalada bélica y continuarán buscando una solución dialogante para evitar que la tensión se recrudezca y vaya a más.

Rusia tiene actualmente muchos países sometidos a sus designios que dependen en gran parte de ellos. Dos de los mejores ejemplos son Bielorrusia y Kazajistán. En el caso de los primeros, Aleksandr Lukashenko, dictador bielorruso, siempre ha alabado a Putin y ha mostrado su complicidad con él, mientras en el caso kazajo, Rusia envió tropas para ayudar a sofocar las protestas que hubo a inicios de este año 2022.

En Rusia, el poder de Vladimir Putin es absoluto. Ya fue presidente entre 1999 y 2008, sustituyendo en el cargo a Boris Yeltsin. Tras un breve mandato de Dmitri Medvedév para impulsar una reforma constitucional que permitiera más de dos mandatos, Putin volvió a ejercer el cargo de presidente, que sigue ostentando hoy, y que ejercerá al menos hasta 2034 tras la última reforma legislativa que llevó a cabo.

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