Fuentes de la lucha antiterrorista han explicado a Herrera en la onda que Izaskun Lesaka y Joseba Iturbe llevaban una semana en ese hotel de Lyon. Carlos Herrera detalla que como tenían que comprobar si había más gente con ellos, una guardia civil camuflada siguió a Izaskun al supermecado y comprobó que, por lo que compraba, había dos personas.
Ellos habían colocado un escritorio detrás de la puerta para que les diera tiempo a escapar, pero no fue así porque cuando entraron sólo le dio tiempo a Izaskun a intentar comerse un USB que fue hábilmente interceptado y está siendo analizado en París.