Según el informe sobre el cumplimiento del presupuesto del Congreso, el capítulo más importante corresponde a las retribuciones de los diputados y salarios de los funcionarios y trabajadores laborales de la Cámara.
El Congreso abonó por este concepto 34,1 millones de euros, más de un 40% del total del presupuesto, de los que 18,4 millones corresponden a retribuciones de los diputados.
En transporte, el Congreso ha ejecutado gastos por valor de 6,4 millones de euros frente a los 7,7 presupuestados inicialmente, lo que supone una ejecución, a 31 de marzo de 2015, del 84%. Otra de las partidas importantes es la destinada a la financiación de los grupos parlamentarios que asciende en su conjunto a los 9,3 millones de euros, prácticamente la cantidad presupuestada.En atenciones protocolarias, el Congreso reconoce unos gastos de 89.318 euros y otros 1,2 millones de euros en limpieza y aseo, de la que se encarga una contrata.
El gasto en inversiones reales alcanzó los 2 millones de euros, 700.000 euros menos, de lo presupuestado para todo el ejercicio. Para este año 2015, el Congreso tiene un presupuesto global de 84,2 millones de euros, lo que supone un incremento del 0,3% con respecto al año pasado, aunque comparado con el de 2009 experimenta un descenso acumulado del 17,91%. Estas cuentas contemplan la congelación de las retribuciones de los diputados por séptimo año consecutivo que se suma al recorte que se aplicó en 2010.