Antón Gómez-Reino encabeza la candidatura Galicia En Común-Anova-Mareas a la Xunta de Galicia en las próximas elecciones gallegas 2020. A su favor juega su experiencia de los últimos años en el Congreso de los Diputados, respaldado siempre por el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias.
Antón Gómez-Reino defiende la gestión realizada por el Gobierno central ante la crisis generada por el coronavirus. Asegura que la situación se ha “salvado” en el conjunto del Estado pero no tanto en Galicia, lastrada en su opinión por “las privatizaciones y los recortes severos” en sanidad pública realizados por el Gobierno de Núñez Feijóo.
Respecto a las residencias de mayores, entiende que “algo tan sensible y tan importante no puede estar en manos privadas”. "No puede ser que las residencias sean un negocio, ni que nuestros mayores, después de una vida de enormes esfuerzos, vean que están al amparo de fondos de inversión", lamenta.
El candidato de la coalición contrapone “la ingente movilización de recursos públicos para defender a las familias, a las pequeñas y medianas empresas en el momento más difícil” realizada por el Gobierno del Estado mientras “la Xunta de Galicia no ha ejercido sus competencias”. Sus prioridades para la recuperación son “cambiar el modelo productivo en Galicia y generar empleo de calidad”. Propone “una renta garantizada de ciudadanía gallega”, complementaria al ingreso mínimo vital, que garantice un ingreso mensual de 950 euros, equivalente al salario mínimo interprofesional.
Las prioridades son “cambiar el modelo productivo en Galicia y generar empleo de calidad”
Para Gómez-Reino, el gobierno de coalición de Pedro Sánchez ha mejorado el nivel de vida de los gallegos. “Si yo soy presidente de la Xunta de Galicia vamos a tener colaboración, comunicación constante y directa con el gobierno central y no vamos a hacer lo que hizo Feijóo con Rajoy, que miró para otro lado ante las medidas que eran lesivas para nuestro país”, sentencia. La alternativa de Gómez-Reino a un nuevo gobierno del PP en Galicia pasa necesariamente por un entendimiento de las fuerzas progresistas: “es imprescindible que la gente que queremos un cambio de izquierdas de este país rememos juntos para que el día 13, en las elecciones gallegas, saquemos a Galicia de esta situación tan difícil”.
- ¿Qué medidas deben adoptarse en el sistema sanitario gallego ante la posibilidad de que se produzca un rebrote?
Hay cuestiones, digamos, de máxima urgencia y cuestiones que tienen que ver con políticas públicas que vienen arrastradas de estos últimos años. Lo primero, el próximo gobierno de la Xunta tiene que reforzar aquellos elementos que se demostraron efectivos para nuestra protección. Me refiero a lo público, a la sanidad pública. Por lo tanto, el próximo Gobierno de la Xunta tiene que desandar el camino andado en estos años por los gobiernos del Partido Popular y de Alberto Núñez Feijóo, que fue un camino de privatizaciones y recortes severos. Tiene que haber una inversión decidida en sanidad pública.
"el próximo Gobierno de la Xunta tiene que desandar el camino andado en estos años por los gobiernos del Partido Popular y de Alberto Núñez Feijóo, que fue un camino de privatizaciones y recortes severos"
Respecto a los rebrotes de coronavirus, lo que tiene que hacer el próximo Gobierno de la Xunta, que sí que hizo el Gobierno del Estado, es que todos y cada uno de los pasos que se den desde el punto de vista epidemiológico y sanitario tienen que ser marcados por la comunidad científica y las autoridades sanitarias. Creo que eso es lo fundamental y lo que nos ha llevado, en una situación muy difícil, a salvar la situación en el conjunto del Estado. No así tanto en el ámbito gallego donde veníamos de tantos recortes. Gracias a los profesionales de la sanidad pública hemos podido responder como sociedad.
- Las residencias de mayores han centrado la preocupación de muchos gallegos cuando el pico del virus golpeaba con más fuerza. ¿Cree que la respuesta ha sido la adecuada?
La privatización del sistema de residencias de nuestros mayores tiene que ver con una de las grandes estafas de los últimos años en Galicia: la privatización de las cajas. Eso fue la puerta de entrada para que las empresas de gestión privada de las residencias de nuestros mayores pudieran aterrizar en Galicia. Y fue de la mano del Partido Popular.
"No puede ser que las residencias de mayores sean un negocio"
Se ha demostrado que algo tan sensible y tan importante para el conjunto de la sociedad no puede estar en manos privadas. No puede ser que las residencias sean un negocio, ni que nuestros mayores, después de una vida de enormes esfuerzos, vean que están al amparo de fondos de inversión y fondos buitre. Que su cuidado depende no de su bienestar sino de fondos de inversión. Creo que hay que desandar el camino andado e ir a un modelo gestión pública de las residencias de nuestros mayores.
- Los estudios epidemiológicos demuestran que el virus apenas ha circulado en Galicia pero aún así ha provocado 619 fallecimientos. Es obvio que reducir los contactos con ciudadanos de otros territorios puede influir en la posibilidad de un rebrote. ¿Cómo debe controlarse el flujo de visitantes y, a la vez, salvar la temporada turística que ahora comienza?
Hago una reflexión inicial, importante. Los responsables y los dirigentes políticos debemos tener cuidado con el tipo de manifestaciones que hacemos al respecto de todo esto. Creo que es una pésima noticia que se hable de “madrileñofobia” o “catalonofobia” o fobia a cualquier ciudadanía de otro punto del Estado o del planeta. Es importante porque estamos en un momento en el que hay fuerzas políticas que avivan discursos de odio o de diferencia entre territorios. Es importante poner eso encima de la mesa.
"Todos los pasos que tengan que ver con una alerta sanitaria tienen que darse escuchando a autoridades sanitarias y científicas"
Todos los pasos que tengan que ver con una alerta sanitaria tienen que darse escuchando a autoridades sanitarias y científicas pero también hay que hacer una reflexión de calado en nuestro país al respecto de qué tipo de turismo queremos construir en Galicia. Afortunadamente nuestro país no tiene el tejido turístico de otras zonas que ha sido pernicioso para el medio ambiente, para las propias poblaciones. Debemos pensar en un turismo sostenible que nos permita convivir con una parte importante del PIB de Galicia pero hacerlo de forma más normalizada. Hay que activar también la movilidad entre gallegos y quizás sea tan interesante, o más, viajar a O Barco, a Sober o a A Mariña lucense a pasar un fin de semana que hacerlo como hacíamos en otras ocasiones. Por lo tanto, potenciar el turismo en Galicia. Es fundamental que conozcamos a nuestro país para quererlo, defenderlo y cuidarlo.
- ¿Fue un error no cerrar las fronteras de las comunidades autónomas al comienzo de la pandemia?
En realidad, las fronteras se cerraron. Hubo una declaración de estado de alarma que es una norma sin precedentes. Se ha reaccionado ante una pandemia de coronavirus inesperada por el Gobierno del Estado y la OMS tampoco podía predecir lo que iba a pasar. Se reaccionó bien y además hay que ser, insisto, muy cuidadosos con ese tipo de debates sobre cierres de fronteras. Lo que hay que hacer es seguir siempre a las autoridades sanitarias, científicas y agradecer el trabajo de los responsables de seguridad del Estado. Ha sido un buen trabajo, meticuloso, sin crear alarma, sin generar más dificultades a los ciudadanos y eso es lo que tiene que hacer un Estado que proteja y una Autonomía y, en este caso un Gobierno de la Xunta de Galicia a partir del 13 de julio.
- Miles de gallegos votarán en una situación económica precaria y con incertidumbre sobre si la actividad en su negocio o en su empresa volverá a ser la de antes. ¿En qué sectores debe volcarse el próximo Gobierno gallego para abrir nuevas oportunidades para las familias?
Si algo ha demostrado esta situación de crisis es que hay gobiernos que de forma inédita hacen una ingente movilización de recursos públicos para defender a las familias, a las pequeñas y medianas empresas en el momento más difícil. Me refiero al Gobierno del Estado. Creo que el Gobierno de la Xunta de Galicia no ha ejercido sus competencias. Ha habido otros gobiernos autonómicos de diferentes signos políticos que han lanzado medidas de apoyo a los autónomos, a la economía, al comercio de proximidad, a las familias... el Gobierno gallego no lo ha hecho. El próximo Gobierno gallego lo que tiene que hacer, por lo tanto, es reactivar la economía.
Nosotros hablamos en el marco estructural de dos cuestiones fundamentales: primero, cambiar el modelo productivo en Galicia y, segundo, generar empleo de calidad. Uno de los grandes problemas que tiene esta comunidad es trabajar y que no te dé para vivir. En definitiva, en nuestro país lo que hay que hacer es una inversión decidida en nuestros sectores estratégicos fundamentales: sector industrial y primarios (pesca, ganadería, lácteo) y, en lo que tiene que ver con la economía del día a día, tenemos que fomentar una economía en la que se irrigue realmente al tejido productivo. Nosotros ponemos encima de la mesa una propuesta de banca pública, de movilización de recursos públicos que sirva para incentivar a la pequeña economía, al comercio a los negocios...
"Ha sido un buen trabajo, meticuloso, sin crear alarma, sin generar más dificultades a los ciudadanos "
Tiene que haber también medidas para combatir la desigualdad y la pobreza generada por una situación difícil en lo social y lo económico. Llevamos una medida que es una renta garantizada de ciudadanía gallega, complementaria al ingreso mínimo vital, que si nosotros gobernamos va a garantizar que todos los gallegos, incluso los que tienen una situación más difícil, cobren mensualmente un equivalente a 950 euros, al salario mínimo interprofesional. Algo imprescindible para sacar a la gente de la difícil situación y para activar la economía y el consumo.
- Preocupa en estos momentos la situación de los trabajadores amenazados de despido en la planta de aluminio primario de Alcoa, en San Cibrao, y su impacto en la economía de la Mariña de Lugo. ¿Cuál es su apuesta para hacer viable la factoría?
Afecta a A Mariña, a toda Galicia, al conjunto del Estado. Es la única fábrica de fabricación de aluminio primario en el conjunto del Estado, en un momento además en el que en Galicia se han perdido 20.000 empleos en el ámbito industrial ante la inacción del actual Gobierno de la Xunta. Creo que hay que hablar de relocalización, no deslocalización y hay que hablar de un futuro necesario y posible para Alcoa en San Cibrao. Es una planta, además, competitiva. Fue privatizada con Inespal por el Partido Popular, por Aznar, cuando era competitiva y, continúa siendo competitiva.
El Ministerio de Industria ha hecho unas propuestas muy claras en lo que tiene que ver con un precio de la energía razonable y posibilidades para que Alcoa continúe pero parece que está decidida a marcharse. Si esto es así, el plan es claro: el día 13 el próximo gobierno de la Xunta de Galicia tiene que aplicar el artículo 30 del Estatuto de Autonomía, levantar el teléfono, llamar al Ministerio de Industria y decirle que Galicia quiere participar e intervenir. Eso no es algo inédito, lo está haciendo el gobierno sardo en Italia con Alcoa en Sardeña. La salida viable es que una empresa que es competitiva, de una producción que es imprescindible en un momento de transición energética para la que el aluminio primario es necesario, tiene que tener, si no hay otra salida, otras formas de buscar inversores. Una participación pública para garantizar esos puestos de trabajo en el presente, en sectores estratégicos, como tiene Francia, Alemania, Italia...el Gobierno de la Xunta debe tener participación en los consejos de administración de aquellas empresas que son fundamentales para Galicia.
- Los resultados electorales en Galicia y en Euskadi tendrán una lectura a nivel estatal que muchos interpretarán como un examen al Gobierno de coalición y de pactos puntuales de Pedro Sánchez. ¿Cree que Galicia está siendo perjudicada o beneficiada en esta legislatura?
Afortunadamente el gobierno de coalición del Estado, más allá de que lleva menos de 200 días muy difíciles, creo que ha demostrado algo que es fundamental. Los ciudadanos no entienden que las administraciones choquen en función de los signos políticos de cada una de ellas. Los gallegos no tienen por qué sufrir o padecer por ello y deben tener el apoyo del Gobierno central. Muchas de las medidas, incluso previas a la pandemia, han mejorado el nivel de vida de los gallegos. La presencia de Yolanda Díaz en el Consejo de Ministros ha conseguido una subida del salario mínimo interprofesional a 950 euros. Eso ha mejorado la vida de un tercio de los asalariados en Galicia. Son medidas de ámbito estructural que demuestran que un Gobierno que protege a las minorías también va a proteger a las minorías en Galicia.
"Relocalización, no deslocalización y hay que hablar de un futuro necesario y posible para Alcoa en San Cibrao"
Si yo soy presidente de la Xunta vamos a tener colaboración, comunicación constante y directa con el Gobierno central y no vamos a hacer lo que hizo Feijóo con Rajoy. En los siete años del gobierno Rajoy, Feijóo miró para otro lado en cada una de aquellas medidas que eran lesivas para nuestro país. Nosotros creemos que si el día 14 hay que llamar y decir que hay que convocar inmediatamente la comisión de transferencias para hablar de la AP-9, habrá que hacerlo.
- ¿Se ve ganador?
No es una cuestión individual. En cualquier caso, lo que creo con rotundidad es que es imprescindible que entre todos, gente progresista que queremos un cambio de izquierdas de este país, rememos juntos para que el día 13, tras las elecciones gallegas, saquemos a Galicia de esta situación tan difícil y vayamos hacia el futuro. Si me veo ganador, veo ganadora a la sociedad gallega. Soy de un espacio político que nació con una voluntad de gobernar para cambiar las cosas y yo aspiro al Gobierno de la Xunta de Galicia pero no por estar sino por poder cambiar las políticas públicas y poder cambiar mi país.