Menstruación sostenible: ¿En qué consiste y cómo aplicarla mes a mes?

Todos los meses ocurre lo inevitable: cualquier momento es bueno para empezar a experimentar los síntomas que nos permiten saber que el periodo se acerca. Nuestro cuerpo empieza a sufrir todo tipo de cambios: calambres abdominales,brotes de acné, sensibilidad en los senos, cansancio, hinchazón, dolor de cabeza o altibajos emocionales, todo ello a causa de las hormonas.

Más del 90% de mujeres experimentan el síndrome premenstrual, que aunque en algunos casos se manifiesta de forma leve, en otras ocasiones los síntomas pueden ser lo suficientemente molestos como para interrumpir nuestras actividades. El día que llega el sangrado también sucede de manera muy diferente de mujer a mujer y mes a mes, pero si hay algo en común en toda esta serie de circunstancias, es que generalmente interfiere de manera física y psicológicamente.

Si bien es cierto que existen múltiples trucos y remedios caseros para paliar con todo lo que los días de menstruación conllevan, con los avances higiénicos también podemos sumarle la oportunidad de que sea mucho más sostenible. A medida que aprendemos y somos más conscientes sobre la importancia de reducir, reutilizar y reciclar, se hace cada vez más evidente que la ecología es importante para reducir el impacto que tenemos sobre el medio ambiente.

A pesar de que es imposible despedirnos de un gran número de productos plásticos, sí hay maneras efectivas de reducir su uso. La forma que tenemos de cuidarnos durante el periodo también se ha adaptado a los nuevos tiempos con una nueva tendencia sostenible y respetuosa con el planeta, y a continuación te contamos todo lo que debes hacer si te interesa controlar los síntomas y el sangrado con métodos que no dañan el ecosistema.

¿Qué es la menstruación sostenible?

Todas estamos acostumbradas a los métodos convencionales de controlar nuestro periodo: usamos compresas y tampones en esos días del mes para absorber el flujo menstrual. Muchas mujeres combinan entre ambos productos según la situación y, sin embargo, a lo largo de estos últimos años se han empezado a introducir nuevos artículos higiénicos: alternativas modernas y mucho más ecológicas en comparación a las opciones que hemos utilizado toda la vida.

La menstruación sostenible consiste en eso mismo: hacer un esfuerzo para reducir la cantidad de desperdicios que generamos con cada periodo utilizando artículos reutilizables u orgánicos. De esta manera ayudamos a eliminar los plásticos de nuestros cuidados básicos, y aunque parece una tarea imposible, lo cierto es que tenemos a nuestro alcance múltiples opciones para conseguirlo.

¿Cómo introducir la sostenibilidad cuando estamos con el periodo?

Aunque la primera vez que escuchamos las palabras sangrado libre o free bleedingnos imaginamos que se trata de dejar correr el flujo al libre albedrío, en realidad es una técnica que encierra mucho más. Es una práctica que se desarrolló en los años 70 y que nos demostró que se puede vivir el periodo con mayor naturalidad. La menstruación sostenible, además de aconsejar dominar el método para sobrellevar aún mejor el período, también da prioridad al uso de productos de higiene íntima respetuosos con el medioambiente.

Puede parecer sorprendente que un gesto tan pequeño como cambiar el tipo de productos que usamos marque tanta diferencia pero, ¿qué podemos utilizar para mantener el planeta sostenible durante muchas generaciones? En primer lugar, tenemos a nuestra disposición un gran número de marcas de ropa interior diseñadas para el periodo. Las bragas menstruales son absorbentes, se pueden lavar y reutilizary tienen el potencial para reemplazar las compresas, reduciendo significativamente el uso de plástico.

La copa menstrual, aunque ha sido una opción que ha estado entre nosotras desde hace más de dos siglos, es hasta hace poco cuando su popularidad ha alcanzado a una gran mayoría de mujeres. En lugar de tirar y desperdiciar una compresa o un tampón cada vez que sus poderes absorbentes han llegado a sus límites, con la copa podemos tirar el flujo, limpiarla y volverla a colocar para que continúe funcionando, un método con nulo impacto ambiental que entra dentro de la premisa de la menstruación sostenible.

La menstruación sostenible también recomienda la introducción de compresas reutilizables. A día de hoy descubrimos innumerables diseños que se adaptan a nuestras necesidades: desde compresas reutilizables delgadas y flexibles, hasta toallas súper absorbentes que podemos usar sin preocuparnos de manchar. Suelen estar fabricadas con tela respetuosa con el planeta, y pueden durar de tres a cinco años. No obstante, aconsejamos tener varias según la duración del periodo para, a medida que lavemos unas, tengamos otras de repuesto.

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