HABLA TAMBIÉN DE SU FACETA DE ABUELA

Ágatha Ruiz de la Prada, sobre Victoria Federica después de coincidir en el tenis: "Se pasó todo el partido mirando el móvil"

Ágatha Ruiz de la Prada ha vuelto a mostrarse de lo más sincera con los medios. La diseñadora ha hablado sobre su nueva faceta como abuela y aunque ha reconocido que no le ha cambiado pañales ni le ha dado el biberón porque es muy pequeñita está encantada con su nieta Deva. Sobre la que también ha hablado ha sido sobre Victoria Federica con quien coincidió hace unos días en el tenis.

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El pasado 5 de abril Ágatha Ruiz de la Prada se convertía en abuela primeriza tras el nacimiento de Deva, la primera hija de su hijo Tristán Ramírez y de una reputada científica vasca con la que mantiene una discreta relación desde hace algún tiempo.

La diseñadora, que nunca ha ocultado sus deseos de ser abuela y tener muchos nietos a los que consentir, está encantadísima, y así lo ha contado orgullosa a Europa Press, revelando cómo es y cómo se porta la pequeña con la que no disimula que se le cae la baba: "¿Cómo es de mona mi nieta? Estoy feliz, la verdad que es una niña ideal, espectacular y bueno ya me tocaba, ¿no?".

"Todavía no le cambio los pañales ni le doy biberones porque es demasiado pequeñita" confiesa, explicando por qué Tristán y su pareja decidieron llamar Deva a su primera hija, que significa "celestial" y "brillante" y para los budistas son seres similares a los dioses. "Si hubiera nacido chico se hubiera llamado Deva y al ser chica pues igual, es un hombre que han elegido ellos, la verdad que es una moda ideal" explica.

Ágatha Ruiz de la Prada junto a su hijo Tristán | Gtres

"Se porta genial, pero es que sabes cómo nació ya... tardó mucho en nacer, costó un montón y ya nació para hacer la Comunión la niña. Ha salido grandísima y ha salido como muy contenta, muy feliz y muy buena" ha contado con una gran sonrisa.

Y sobre la que también ha hablado ha sido sobre Victoria Federica, en el punto de mira tras sincerarse en el podcast de Vicky Martín Berrocal y confesar que en ocasiones se siente "enjaulada" por la presión mediática que sufre. Y aunque siente una gran simpatía por la hija de la infanta Elena, no ha dudado en recriminarle su actitud durante la final del Mutua Madrid Open de tenis: "Se pasó todo el partido mirando el móvil. A lo mejor yo también miré un poco, pero bueno, en fin, yo no soy royal" ha comentado.