Evita los empachos navideños con estos consejos

Los días antes de las comidas

Lo ideal es empezar a preparar nuestro cuerpo durante los días anteriores a las fiestas para evitar desde el principio empacharnos. En primer lugar, deberemos introducir más fruta, verdura y legumbres a nuestra dieta, reduciendo el consumo de alimentos con azúcar y grasas. Asimismo, tampoco debemos obsesionarnos con el número de calorías que ingerimos: el objetivo es mantener una dieta saludable y equilibrada para afrontar las comidas navideñas.

Seamos sinceros. ¿De verdad alguien hace ejercicio durante las fiestas? Por ello debemos aprovechar los días previos a las fiestas navideñas para adelantar trabajo: una hora de deporte al día ayudará a preparar nuestro cuerpo para las comilonas y a sentirnos menos pesados.

Durante las fiestas

Sin darnos cuenta, hemos comido hasta llenar nuestro estómago por completo mientras charlábamos entre risas recordando con nuestros seres queridos momentazos que hemos vivido juntos. Cuando luego llegamos a casa y es la hora de cenar no tenemos hambre, así que nos vamos a la cama sin comer nada. Si lo que queremos es evitar más empachos durante las fiestas, esto es algo que debemos evitar. Es importante mantener las 5 comidas diarias recomendadas también durante las fiestas, para no afrontar el siguiente ágape con mucha hambre, que es lo que ocurrirá si nos saltamos comidas.

Lo ideal es que que sean comidas ligeras, añadiendo por ejemplo alimentos como fruta, verdura, legumbres o zumos, siempre no azucarados. También es recomendable sustituir los lácteos enteros por desnatados, ya que contienen un porcentaje de grasas menor.

Por otro lado, hay que tener cuidado con el alcohol y los dulces como los turrones o los polvorones, tomándolos con moderación. Son productos que tienen grandes cantidades de azúcares y de grasas y que nos aportan muchas calorías vacías. Por si fuera poco, el alcohol ralentiza nuestro metabolismo y en consecuencia nuestro cuerpo quema las grasas más despacio de lo normal. Vamos, que la combinación entre comidas abundantes, bebidas alcohólicas y muchos días sin actividad física nos pasará factura en enero.

La clave para que esto no pase es la moderación. Disfrutar de la comida es uno de los placeres de las fiestas, pero servirse porciones más pequeñas nos permitirá poder probar todo sin llegar empachados al momento del café. Si conseguimos evitar llenar el plato, nos podremos dar por satisfechos (en todos los sentidos).

Escuchar nuestro cuerpo

En realidad este es un consejo que deberíamos aplicar durante todo el año, ya que nuestro cuerpo nos dice constantemente lo que necesita:

- Ir al baño de manera regular. El yogur probiótico, la kombucha, las alcachofas y el kiwi son algunos de los alimentos que nos ayudan a combatir el estreñimiento de manera natural. Otra alternativa a la que podemos recurrir, si fuera estrictamente necesario, son los medicamentos laxantes, que podemos encontrar en cualquier farmacia.

- Hidratarnos. Los expertos recomiendan tomar entre un litro y medio y dos litros de agua al día fuera de las comidas. Bebiendo mucha agua ayudaremos a lubricar el aparato digestivo, además de prevenir el estreñimiento. Una opción puede ser sustituir parte de las bebidas alcohólicas de las sobremesas por infusiones.

- Evitar ciertos alimentos. De la misma manera que hay alimentos que nos ayudan a combatir el estreñimiento y que nos hacen sentir mejor, también hay otros que nos conviene evitar durante estas fiestas. El café, el té y el arroz son un ejemplo, ya que dificultan que vayamos al baño y favorecen la irritación intestinal.

- Hacer ejercicio. Lo sabemos, ir al gimnasio durante las fiestas se convierte en algo prácticamente imposible. Pero, caminar entre 45 minutos y una hora al día ayudará a que nos encontremos menos empachados. También facilitará la digestión y, de paso, quemaremos las calorías extras que hayamos ingerido. Aprovechar para salir a dar un paseo con nuestra familia, pareja o amigos a observar la decoración navideña es un clásico de las fiestas.