Cosas que se comen en Japón: el semen de bacalao, por ejemplo

Estamos en Cuaresma y se impone el bacalao. Hay mil maneras de cocinarlo y degustarlo, pero ninguna como la que se traen entre manos desde hace años en Japón, donde se sirve una tapa a base de esperma crudo de este animal. Y parece ser que los pescadores de Alaska han encontrado un filón inesperado contra la crisis: exportan semen de bacalao a los japoneses y parece ser que se están haciendo de oro. Esta delicatessen se hace llamar 'shirako', lo que podríamos traducir como "los hijos blancos".

El semen de bacalao, que se sirve en el interior de los testículos, tiene un sabor suave, según quienes lo han probado, suave, y una textura cremosa similar a la de los sesos. Suele degustarse crudo, acompañado de alguna salsa y con algún complemento como las algas, por ejemplo, aunque también hay quien lo degusta frito, en tempura, o incluso en sopas. De hecho, no es el único semen de pez que tiene éxito entre los gourmets japoneses, pues es habitual que se deguste semen de otros peces, como el pez globo, un pez extremadamente venenoso que tiene que ser cocinado con mucho cuidado sólo por manos experimentadas. El pez globo o fuju es, de hecho, uno de los manjares más caros del mundo, del que se come tanto su carne como su esperma, que puede ascender a unos 300 € aproximadamente.