Publicidad
CUANDO NACIÓ PESABA MENOS DE UN KILO
La increíble recuperación de Máximo, un niño con una enfermedad cerebral que no le deja crecer
Máximo es un niño argentino de tan solo ocho años. Sufre de Encefalopatia Crónica no Evolutiva, una extraña enfermedad cerebral que dificulta la evolución habitual de todo niño en sus primeros años de vida. Tras unos tratamientos médicos, el niño parece empezar a conocer una nueva vida.
Máximo, un niño nacido tras tan solo 25 semanas de gestación, pesaba en sus primeros instantes de vida 930 gramos. Algo que le hizo permanecer en el hospital en cuidados intensivos más de cinco meses, una época en la que fue sometido a más de nueve cirugías y estuvo en todo momento con oxígeno. Cuando por fin salió del centro sanitario la pesadilla del niño y su familia continuó: tuvo que estar con la atención domiciliaria de una enfermera las 24 horas del día.
Tras superar estos problemas que ponían en peligro su vida, algo parecía ir mal a pesar de todo. Máximo no hacía cosas que el resto de niños hacían tras un año y medio de vida: no gateaba y a penas se movía. Los padres acudieron al médico, donde les recomendaron terapias de estimulación. Unas técnicas que no acabaron de funcionar y el niño no conseguía sostener la cabeza. Los padres volvieron a acudir al hospital donde finalmente le diagnosticaron una Encefalopatia Crónica no Evolutiva, una enfermedad que interfiere en el crecimiento y que dificulta el habla y la capacidad de caminar.
En 2012, los padres buscaron alternativas. Les recomendaron el método Cuevas, que consiste en la elaboración de una seria estrategias que desafían al cerebro en busca de respuestas automáticas.
A finales de ese año, llevaron a cabo el primer viaje a Chile donde tendría lugar la recuperación. Para recaudar dinero para todo este tratamiento, el padre de Máximo, que trabajaba en la selección argentina, comenzó sorteando camisetas de fútbol entre sus amigos y conocidos. Una iniciativa que tuvo éxito por lo que empezó a recibir más equitaciones oficiales de algunos de los jugadores de la Liga Argentina, lo que se tradujo en una gran recaudación final.
Tras un tiempo de recuperación, y tras ser apuntado a un colegio pedagógico especial en el que tratan este tipo de cuestiones, Máximo parece estar empezando a ser consciente de su vida. El niño, avanza a pasos agigantados y ya tiene reacciones, trata de comunicarse y hasta ha dado sus primeros pasos.
Publicidad