Kilian Schonberg ha asegurado que "Mi aspiración siempre ha sido crear mi camino como fotógrado con mi propia perspectiva creativa, a pesar de ser daltónico".
Este joven fotógrafo aleman de apenas 30 años se dio cuenta de que "podría transformar esta llamada desventaja en mi fotaleza y crear a partir de ella un estilo único".
Kilian no puede distinguir claramente las diferencias entre los tonos verdes y marrones por lo que declara que "no me preocupo por esos tonos y simplemente me concentro en las formas que crean las luces y los árboles".