El Ibex 35 ha cerrado la sesión casi plano (+0,1%) y ha logrado mantener la cota de los 8.700 puntos, gracias al tirón en la apertura de Wall Street, que subía casi un 2%, en una jornada marcada por la publicación de la mala cifra de parados en España en 2011, que marcó su nivel más alto desde 1996, año en que comienza la serie histórica comparable.
Las subidas en los pesos pesados, a excepción de Repsol (-0,44%), colocaron al índice en los 8.734 enteros, si bien ninguno se anotó ascensos superiores al 1%. Santander subió un 0,99%, mientras que BBVA limitó su ascenso al 0,59%. Iberdrola repuntó un 0,42% y Telefónica, un 0,37%.
Los mayores repuntes los protagonizaron los títulos de Indra (+2,66%), Arcelormittal (+2,30) y Acerinox (+2,29%). Amadeus (+2,15%) y OHL (+1,59%) completaron el 'top 5' de las ganancias.
En el lado de las pérdidas, las mayores caídas las registraron BME (-1,84%), Acciona (-1,67%), Caixabank (-1,42%), Bankia (-0,81%) y Mediaset (-0,75%). Bankinter perdió un 0,62%, y Popular y Sabadell cerraron en plano.
El selectivo español se situó a la cola de las ganancias en las principales plazas del Viejo Continente. El Footsie de Londres lideró los repuntes, con ganancias del 2,2%, seguido por el PSI de Portugal (+1,7%) y el Dax de Francfort (+1,5%). Milán ganó un 1,2% y París, un 0,7%.
Prosigue la presión sobre la deuda soberana
En el mercado de deuda pública, la prima de riesgo española seguía presionada y escalaba por encima de los 340 puntos básicos, tras iniciar la jornada en el umbral de los 320 puntos, mientras la italiana se situaba en los 500 puntos. El euro avanzaba posiciones respecto al dólar y al cierre del mercado se intercambiaba por 1,3065 'billetes verdes'.
