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LOS RETOS DE LA VEJEZ

¿Cómo se vive en el pueblo más envejecido de España?

¿Imaginan no tener tiendas, farmacia o panadería cerca? Los habitantes de Arandilla del Arroyo viven así: en su pueblo el médico solo va unas horas a la semana y si quieren coger el autobús, tienen que avisar al conductor el día de antes.

Arandilla del Arroyo, en la Alcarria, es el pueblo más envejecido de España. Allí solo viven siete de las trece personas censadas y hace casi cuatro décadas que no ven nacer a nadie. Los niños solo llegan en verano a este pueblo situado en la provincia de Cuenca.

Los vecinos cuentan que al llegar el verano el pueblo está lleno y al asomarse a la ventana ves la alegría de los niños y las familias que recorren las calles. Sin embargo, una vez que llega el invierno, las calles se vacían por completo.

En estos pueblos no hay ni lo básico del día a día. No hay tienda ni panadería y el médico va unas horas a la semana. Tampoco hay tiendas, farmacia ni peluquería.

Lo que sí pasa por Arandilla del Arroyo es el autobús, pero tienen que telefonear al conductor el día de antes si quieren que pare en el pueblo porque hay muy pocos viajeros.

Las pocas habitantes de este pueblo no se plantean envejecer aquí: "No puede ser, porque no hay médico ni famacia y aunque tenemos coche llegará un día en que no podamos conducir".

Preguntados sobre el secreto para mantenerse joven, nos envían a hablar con Serafín, un habitante de este pueblo que tiene 102 años. Cuando le preguntamos sobre cómo lo hace para mantenerse joven, se ríe. "Trabajar siempre como los animales", dice.

Cuando Serafín era joven, en el pueblo ohabía más de 250 vecinos y una escuela. "Había un maestro que nos enseñaba mucho, era buen maestro", recuerda.

Los vecinos de Arandilla recuerdan que cuando la gente era joven se marchaban del pueblo para buscar una vida mejor porque antes la gente no quería la vida del campo. Pero ahora, algunos de aquellos jóvenes regresan ya ancianos a sus orígenes y son ellos los que, de momento, están rescatando a sus pueblos del abandono.

Pero Arandilla no es el único pueblo que está perdiendo población. En España hay alrededor de mil pueblos en los que no hay censado ni un solo niño.

Los expertos creen que este proceso se debe a que está habiendo un cambio en la forma de reproducirnos y creen que la descendencia se tiene ahora en zonas urbanas.

Además consideran que si los pueblos estuvieran bien comunicados y tuvieran servicios básicos, podría haber más población en ellos.

Julio Pérez, demógrafo, cree que este proceso se puede revertir en algunos casos, pero no en todos.

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