VOZ RONCA

Mi hijo suele quedarse afónico: ¿Debo llevarlo al pediatra?

A muchos niños les pasa con relativa frecuencia: se ponen roncos o afónicos. Si se trata de algo repetitivo podría señalar un problema en la laringe.

Niña con dolor de garganta

Niña con dolor de gargantaPexels

Publicidad

La afonía es la incapacidad total para emitir sonidos con las cuerdas vocales. La disfonía o voz ronca es el cambio en la calidad de la voz y la disminución de su tono. Ambas se producen generalmente por un problema en la zona de la laringe que es donde se origina el sonido.

Estos cambios en la voz suelen afectar a los niños con bastante frecuencia, aunque la gran mayoría de las veces las causas son benignas y se solucionan con el tiempo. Entre el 6-23% de niños entre los 4 y los 12 años las sufren en algún momento; además, suelen afectar 3 veces más a los niños que a las niñas.

Ante una disfonía de reciente aparición o crónica se debe consultar con el pediatra para investigar la causa sobre todo si presenta signos de alarma.

¿Cómo se produce la voz?

La voz se produce en un órgano que se encuentra en la parte alta del sistema respiratorio: la laringe. La laringe está formada por las cuerdas vocales que son unas bandas fibrosas que vibran cuando se expulsa el aire de los pulmones.

Estas vibraciones producen sonidos que con la modulación de la garganta, la nariz y la boca emiten la voz propia y característica de cada persona. Cuando se producen inflamaciones o irritaciones de las cuerdas vocales por diversas causas el tono de voz puede cambiar produciendo voz ronca o apagada que conocemos como disfonía.

¿Por qué se produce la disfonía?

En bebés recién nacidos o de pocos meses, un llanto afónico o muy agudo puede ser signo de malformaciones congénitas en la zona de la laringe que estrechan el orificio o parálisis nerviosas a nivel de las cuerdas vocales que impiden que se abran completamente.

El mal uso y abuso de la voz es la causa más frecuente de voz ronca en la infancia. Si el niño se esfuerza mucho gritando, cantando o hablando sobre todo en ambientes secos, con humo de tabaco o ruido ambiental puede dar lugar a una inflamación a nivel de las cuerdas vocales que se manifieste con esta alteración de la voz.

Un sobreesfuerzo continuado de la voz puede llegar a producir nódulos en las cuerdas vocales que provocan episodios de ronquera repetitivos.

Un niño con dolor de garganta
Un niño con dolor de garganta | iStock

Laringitis en niños

La laringitis aguda es un cuadro infeccioso normalmente viral que provoca inflamación de las cuerdas vocales con la consecuente disfonía. Se suele asociar con cuadros catarrales, infecciones respiratorias o alergias. Suele iniciarse de forma brusca por la noche y se acompaña de tos perruna "o de foca" y estridor, que es un ruido inspiratorio que se produce por la estrechez a la entrada de aire a los pulmones debido a la inflamación de la laringe. Puede llegar a ser grave y provocar sensación de dificultad respiratoria por lo que muchas veces requiere de una atención urgente.

Laringitis debidas a reflujo gastroesofágico. En este caso la disfonía se produce por una irritación repetitiva de las cuerdas vocales debido al ascenso del ácido del estómago hasta la laringe.Causa tos seca sobre todo por la noche y afonía por la mañana.

¿Cuando nos debe preocupar una ronquera?

Los signos de alarma que nos deben hacer consultar con el pediatra son:

  • Dolor de garganta asociado o irradiado hacia el oído.
  • Si la disfonía dura más de 2 semanas o aparece en menores de 2 años.
  • Si se acompaña de dificultad para tragar o para respirar.
  • Si se acompaña de tos con sangre o pérdida de peso.
  • Si no responde al tratamiento pautado.

¿Cómo se pueden tratar las disfonías?

El tratamiento debe ser individualizado para cada caso y dependerá de la causa que se sospeche.

Si la afonía es recurrente o no se soluciona con el tratamiento finalmente deberá ser valorado por un otorrinolaringólogo que mediante una laringoscopia (un tubito muy fino con una cámara al final) verá cómo funcionan las cuerdas vocales.

De forma resumida, las laringitis agudas se resuelven completamente en pocos días y pueden precisar tratamiento antiinflamatorio o con corticoides. La afonía por sospecha de reflujo gastroesofágico mejorará con el tratamiento antiácido. Las disfonías por un mal uso de la voz o los nódulos laringeos requerirán intervención por el logopeda que recomendará ejercicios de reeducación vocal. Los nódulos laríngeos en los niños no se operan de entrada ya que la mayoría desaparecen con la pubertad y mejoran con la terapia de higiene vocal.

Novamas» Vida

Publicidad