Hay tiempo para todo

En el siglo XXI hemos progresado en muchas cosas, pero aún el tema de la conciliación familiar y laboral sigue dando mucho que hablar y desear. No obstante, mientras esperamos que esto cambie nosotros debemos de actuar y guiar de la mejor manera a nuestros pequeños cuando estamos en casa.

En casa nos gusta poner “tareas” a todos para hacer la convivencia más sencilla, teniendo por supuesto en cuenta la edad de cada uno y nos gusta que algunas de estas “tareas” vayan rotando semanalmente: poner la mesa, quitar la mesa, recoger el cuarto, hacer la cama, ponerle de comer a los perros… Anita como es pequeña más que ayudar suele hacer lo contrario cuando lo intenta, pero nos encanta verla hacer las cosas con cariño e ilusión.

Durante el curso, el papá de la casa y yo intentamos ponernos de acuerdo con los deberes, pero es cierto que contamos con seños de apoyo que nos ayudan para esas cosillas que se les atrancan a los peques. Las "seños" Ana, Belén y Sara son entrañables y los niños las adoran. Aún así, no nos gusta delegar los deberes en los demás así que siempre nos esforzamos su padre y yo en revisarlos y en hacer con ellos todos los trabajos que mandan en la clase lo mejor posible.

Ahora en verano, nos encanta poder disfrutar de ellos DE VERDAD, sin prisas y sin horarios pero siempre con nuestra “pequeña rutina” establecida: desayunar juntos, organizar la casa, hacer deberes y …¡A LA PLAYA A DISFRUTAR!