Declarada en Baiona y Nigrán la alerta por sequía

En el embalse de Zamáns, en Vigo, se mantiene la reserva a un 40% de su capacidad. Este embalse abastece a las localidades del Valmiñor de Nigrán y Baiona. En ambas, la Xunta ha decretado la alerta por sequía. Una situación que, aunque no conlleva restricciones de consumo para la población, sí implica posibles riesgos de suministro.

No obstante, los dos municipios, que duplican su población durante el verano, llevan meses aplicandolimitaciones del uso del agua. Entre ellas, destaca la supresión de los riegos de jardines y baldeos de calles, el cierre de las duchas y lavaderos de las playas o la prohibición de llenar piscinas.

Unas medidas que afectan a cerca de 19.000 habitantes y que el alcalde de Nigrán, Juan González, espera no tener que prolongar mucho tiempo: "Confiamos en que lloverá este otoño y nuestros ríos y embalses se recuperarán". Además se muestra optimista con respecto al suministro, ya que los turistas se han ido y no hay tanto consumo de agua.

Con esta alerta por sequía, también entra en vigor de manera automática una reducción en el caudal ecológico de agua que se deja pasar, en este caso desde las presas de Zamáns y Baíña, hacia la continuación del cauce. Además, la Xunta ha activado la prealerta para el resto de la ciudad olívica y nueve ayuntamientos más dependientes del embalse abastecido por el río Verdugo.

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