En la casa de los Castillo, no hay un día de descanso, para nadie. Sobre todo para Sandra, que casi daña de forma grave a Lucia, simplemente rozándole con la piel mojada. Harta de ser una amenaza para todos, la joven intentará controlar sus poderes, y así poder volver a tocar a alguien.

Pero necesitaráayuda. Culebra ( Luis Fernández) se prestará voluntario, pero también tiene sus propios problemas: se enfrentará a un profesor, mostrando su rebeldía. Pero sin darsecuenta que sus actos pueden tener consecuencias graves no solo para él, sinopara toda la familia..La apertura de un expediente disciplinario pude suponerque sus identidades falsas sean descubiertas.

No son los únicos enproblemas: Lucas ( Mario Marzo), intentando devolver una broma pesada, acaba desencadenandouna serie de hechos que pueden llevar. ¡Al divorcio de los Ruano!

Tampoco es queninguno de los tres pueda pedir ayuda a sus mayores: ni a Jimena (Angie Cepeda), que parecemuy afectada, aunque nadie sabe por qué. Ni a Mario(Antonio Garrido), que se acerca cada vezmás y más a Nuria (María Cotiello), hasta el punto de encontrarse a punto de besarla.