Olmedo salva de la agresión del Chino a Pablo y Elisa. Don Eusebio, agradecido, le contrata como jefe de seguridad en su cortijo. El ex capitán paga con opio al Chino por su “trabajo”. Después, en la posada, pide a Clara que se acueste con él, pero la muchacha se niega.Los Garmendia, además del asalto del Chino, se llevan otro disgusto porque reciben malas noticias de Salamanca y es que una gripe porcina está diezmando su ganado. Don Eusebio se da cuenta de que tiene que acelerar el desvío del canal y las acequias para poder hacer negocio en Arazana.